Considerado como uno de los fundadores del hermetismo italiano de entreguerras, el escritor, poeta y crítico literario Eugenio Montale, nacido en Génova, Italia, cumple este miércoles 31 años de haber muerto.
El autor, que vino al mundo el 12 de octubre de 1896, aportó una visión acerca de la problemática y las inquietudes del hombre contemporáneo, partiendo de hallazgos formales del simbolismo y del decadentismo, a los que enriqueció con una voz inconfundible.
El escritor falleció el 12 de septiembre de 1981 en Milán, Italia.
Montale inició sus estudios de letras en su ciudad natal, dedicándose sobre todo a los clásicos italianos y de la novela francesa, pero los interrumpió por motivos de salud y con el objetivo de aprender canto lírico, de acuerdo con información del portal “biografíasyvidas”.
Participó como oficial de infantería en la Primera Guerra Mundial (1914-18) y también colaboró en la fundación de la revista “Primo tempo”, con una influencia muy fuerte, pese a que sólo se publicaron ocho números.
En 1927, el autor se trasladó a Florencia para trabajar en la editorial Bemporad, además Eugenio Montale fue nombrado director del gabinete científico literario G. P. Vieusseux. Entre sus obras destacan “Las ocasiones” y “El vendaval y otras cosas”.
Su primera colección de poemas fue “Huesos de sepia”, que se publicó en 1925, donde reflejó todos los paisajes ambientados y escenarios en los que pasó su infancia y expuso los sentimientos característicos de su poesía, con un sentimiento de cansancio y de soledad.
El siguiente libro fue “La casa dei doganieri”, en 1932, y el tercero titulado “Le occasioni”, de 1939, sin abandonar la introspección pesimista, abrió la presencia de ocasiones o casualidades que modifican la vida cotidiana.
Tras su obra “Finisterre”, de 1943, Montale publicó “La bufera e altro” en 1956, siendo uno de sus libros más celebrados, ya en la vejez, el autor entregó “Las crónicas de Cuaderno de cuatro años” en 1977, los memorables poemas de amor que integran las dos partes de “Xenia” y el testamento de su concepción del mundo que significó “Satura”. en 1971.
Al término de su trayectoria, Montale fue reconocido con el premio Nobel de Literatura en 1975, por la singularidad de su poesía desbordada.