Existen distintos métodos de tortura dirigidos a volver más cruel y prolongado el sufrimiento agónico de la muerte, pero buscando la inmediatez en las ejecuciones se comenzaron a implementar nuevos mecanismos diseñados para ejecutar a los condenados.
Uno de estos mecanismos es la guillotina, la cual consiste en un armazón de dos montajes verticales unidos a un travesaño que sostiene una cuchilla de acero en la parte superior, mientras que en la parte inferior tiene un cepo de dos medias lunas y una plancha de madera que funciona como báscula. El condenado era colocado de forma que la cuchilla lo degollara. El proceso tardaba menos de un minuto.
Un día como hoy pero del año 1792 se realizó la primera ejecución con guillotina durante el período de la Revolución Francesa, con la cual está fuertemente vinculada.
Pese a la creencia anterior, vale saber, para aquellos que gustan de las curiosidades históricas, que aunque el uso de la guillotina se popularizó precisamente durante la Revolución Francesa, hay quienes afirman que existen registros del uso de esta que datan desde el siglo XIII.
El nombre de guillotina, vale saber, se le dio debido a que fue el diputado Joseph Ignace Guillotin quien la propuso para utilizarse en las ejecuciones dejando de lado los métodos tradicionales.
Algunos otros lugares donde se popularizó el uso de la guillotina son el Reino Unido, Bélgica, Suecia, Italia, la antigua República Federal de Alemania así como la anterior República Democrática de Alemania.
Con la abolición progresiva de la pena de muerte en Europa se fue suspendiendo también el uso de la guillotina. La última vez que se utilizó en Suecia fue en 1910, en Bélgica en 1918, en Alemania Federal en 1949 y en la República Democrática de Alemania en 1969. Francia esperó hasta 1981.
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