
Gabriel Siria Levario, mejor conocido como Javier Solís, nació en México, Distrito Federal, el 1 de septiembre de 1931, y murió el 19 de abril de 1966.
A 45 años de su muerte, el actor y cantante Javier Solís, quien fuera reconocido como "El Rey del Bolero Ranchero", al revolucionar la interpretación de música mexicana debido a sus cualidades vocales, recibirá un homenaje por parte del músico Javier Castañón, en Perú.
Con este motivo, algunas de las canciones más famosas de Solís, tales como: "Si Dios me quita la vida", "Sombras", "Esclavo y Amo", "Cenizas" y "Obsesión", podrán ser escuchadas el próximo 28 de abril en el auditorio Ricardo Palma de Lima, Perú, donde Castañón presentará un espectáculo titulado "Boleros rancheros".
Gabriel Siria Levario, mejor conocido como Javier Solís, nació en México, Distrito Federal, el 1 de septiembre de 1931, y murió el 19 de abril de 1966.
Dado su legado musical, Javier Solís, también fue recordado durante la octava edición del Festival del Mariachi "Felipe Valdés Leal", realizado en Saltillo, Coahuila a finales de marzo pasado.
Cada año el evento es dedicado a alguna figura distinguida de la música mexicana y en esta ocasión, tocó el turno a "El Rey del Bolero Ranchero", cuyos éxitos: "Payaso", "Esta tristeza mía", "Cataclismo" y "Luz de luna", fueron interpretados por agrupaciones como el Mariachi Sol de México y el Mariachi Santa Cecilia.
Javier Solís, quien tuvo una corta vida, pues murió cuando tenía 34 años, llenó toda una época como intérprete del bolero ranchero, el cual puso en boga entre las décadas de 1957 y 1966.
A los 18 años, Siria Levario se inclinó por la música, lo que lo llevó a ganar concursos de canto en las carpas de barrio como la del Teatro Salón Obrero y la del Salón Escandón, gracias a sus interpretaciones de tangos bajo el seudónimo de Javier Luquín.
Se inició sin una enseñanza profesional, pero después comenzó a tomar clases de educación de la voz con el maestro Noé Quintero.
De manera paralela, su admiración por Pedro Infante hizo que en sus inicios adoptara un estilo similar, sin imaginarse que tiempo después impondría uno propio, gracias a las capacidades vocales con las que contaba.
Durante el entierro de Pedro Infante, el 18 de abril de 1957, surgió de entre la multitud para subir a una cripta y comenzar a cantar "Grito prisionero" como lo hacía el "Ídolo de Guamúchil", lo que retrasó el lanzamiento de sus otras grabaciones, ya que los productores no eran partidarios de ese estilo.
video de youtube