
Infecciones en la piel. Es lo que han padecido vecinos de la colonia Jardines del Oriente de Matamoros cada vez que se estanca el agua.
Gabriela Ríos, con tres hijas menores de edad y su madre de 54 años, vive desde hace 8 años en la colonia Jardines del Oriente de Matamoros, donde a diario tiene que lidiar con el lodo y el agua estancada a las afueras de su vivienda. "Siempre se pone así, imagínese el olor", comenta Gabriela.
Además del olor y la falta de pavimentación, la vecina explica que el principal problema es la salud, pues cada vez que suceden estos estancamientos prolongados de agua, sus hijas enferman de la piel, ya que presentan salpullidos e irritaciones por el inevitable contacto de las menores con el líquido.
"Doña Irma", madre de Gabriela, asegura que por su edad y por el estado de las calles, le es imposible siquiera caminar frente a su vivienda, "si piso un charco me resbalo... uno se puede lesionar".
CANSADOS DE QUEJARSE
Las habitantes señalaron que desde la primera vez que sucedieron estos estancamientos se le pidió apoyo al Ayuntamiento, sin embargo, debido a la falta de respuesta y a que inclusive se han acostumbrado al ambiente han dejado de denunciar esta situación, "ojalá un día nos hagan caso".
Gabriela Ríos señala que es en estos meses de agosto y septiembre cuando la situación empeora, ya que inclusive se han presentado ocasiones, donde por el exceso de lluvias, las aguas estancadas se introducen al interior de las viviendas, causando daños a los muebles sin que nadie responda por ellos.
De la colonia Jardines del Oriente, el punto más afectado, según otros vecinos, es el cruce de la avenida Hidalgo y bulevar Gustavo Díaz Ordaz, donde a diario cientos de vehículos que circulan por la zona se ven obligados a desviarse del cruce para evitar daños o accidentes.
TEMOR
La vecina también denunció que después de algunos días de que cae la lluvia, comienzan a hacer su aparición los mosquitos, elevando el riesgo de contraer dengue o alguna otra infección en la piel.
Aunque acepta no haberse puesto en contacto con la administración actual, Gabriela lanza un llamado para que cuanto antes se les apoye con el desazolve del líquido o por le menos se coloque piedrilla para evitar el lodo, "que nos apoyen antes de que se nos meta a la casa", explica mientras señala un charco de aspecto verdoso frente de su vivienda.