Teme por su vida

Silvia Irabien Milke, ex concursante de Big Brother mejor conocida como “La Chiva”, declaró que no pondrá en riesgo su integridad y la de su familia y señaló que no lucra con la tragedia del futbolista Salvador Cabañas.

“Es muy triste saber que para algunas personas, si dices la verdad, creen que es por obtener algún beneficio, y si no das la cara estás escondiendo algo... Quiero dejar claro que mi comparecencia ante las autoridades no es movida por intereses económicos, sino fundamentalmente es un deber cívico”, detalló en un comunicado.

Además, “La Chiva” dice que muchas personas supieron de su relación con Jorge Díaz Treviño, identificado por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal como Jorge Balderas Garza.

Debido a esa situación y para evitar especulaciones, Silvia decidió hablar con Adela Micha para relatar cómo lo conoció.

Irabien indicó que no volverá a hablar del tema en los medios, “a efecto de evitar poner en peligro mi integridad física o la de mi familia”. Sin embargo, puso a disposición los teléfonos de su abogado para cualquier duda o aclaración.

SU ABOGADO LO REAFIRMA

Por su parte, el abogado Cipriano Sotelo, reafirmó que de ahora en adelante él responderá los cuestionamientos que los medios tengan para Irabien, para que ella ya no sea expuesta ante la opinión pública.

“Está pensando que esto pueda devenir en una revancha o venganza por este señor. Ella lo conoció normal, súper sociable, tenía excelente relación con todo mundo, accesible y en la Procuraduría le retratan a una persona con dinero, poder, incluso que tiene un patrimonio abundante.

“Cuando se entera de esa situación, pide a la Procuraduría que, por su conducto, haga la invitación a autoridades de Yucatán que le aporten una semiseguridad. No está solicitando una custodia constante, sino que tengan verificadas sus actividades, que una patrulla ande rondando para evitar algún sustito”, indicó el litigante en entrevista telefónica.

Tras comparecer el pasado miércoles, aseguró Sotelo, la modelo espera no volver a ser requerida, aunque saben que la autoridad tiene la facultad de hacerlo cuantas veces crea conveniente.

“No va a utilizar los medios para hacerle ver como un irresponsable con su hija porque ella no pelea ninguna pensión ni ningún derecho de paternidad.

“Ella registró a la niña con sus apellidos, como hija natural, y hoy su esposo acepta a la niña como si fuera su padre, no le va a exigir a él nada, ni en cuestiones de paternidad ni de pensión alimenticia, porque no le interesa, dice que si en su momento no se dieron las cosas, ahora menos”, agregó Sotelo.