El jefe de sicarios de una célula y segundo jefe de importancia de 'Los Zetas', brazo armado del cártel del Golfo, en Tabasco falleció en el hospital militar de la 30 zona militar, por la complicación de varios padecimientos, informó el Procurador General de Justicia del Estado (PGJE), Rafael González Lastra.
El fallecido jefe de la célula al servicio del cártel del Golfo, Raúl Martínez Serafín, alias “El Serafín” o “El Pica”, fue detenido la noche del 10 de julio pasado en un punto de control militar ubicado en una carretera del municipio de Cunduacán, y luego fue trasladado a la sede de la 30 zona militar.
No obstante, a las 13:00 horas del sábado 11 murió, luego de ser internado en la clínica castrense.
Los informes de los médicos legistas de la PGJE señalan que la muerte del también ex policía federal y municipal de Macuspana fue por paro cardiorespiratorio, a causa de una probable broncoaspiración, “por una suma de circunstancias”, como el síndrome de abstinencia de cocaína, hipertensión arterial, obesidad y afectaciones de pulmones y corazón, que le causaron el fallecimiento “en forma repentina”.
González Lastra indicó que el jefe de la célula de 'Los Zetas' había sido detenido a raíz de informes de inteligencia que lograron su ubicación y persecución.
Antes de fallecer, Martínez Serafín, confesó su participación –a decir de las autoridades- en la masacre ocurrida en Macuspana el 14 de febrero pasado, contra el policía Carlos Reyes López y 12 personas más, entre ellos los hijos, sobrinos, esposa y madre de quien también era su primo.
El titular de la PGJE, acompañado del comandante de 30 zona militar, José de Jesús Ramírez, dijo que el múltiple homicidio lo cometió 'El Serafín' o 'El Pica', en 'venganza' por la detención de cuatro de sus lugartenientes durante un operativo efectuado días antes.
Este jefe de pistoleros también había confesado su participación, junto con otras tres células de pistoleros del cártel del Golfo, en otra matanza registrada el 14 de mayo pasado en el municipio de Cunduacán, donde acribillaron al policía municipal Baldomero García junto con siete personas más, entre ellas sus menores hijos, esposa y vecina.
El jefe de la célula criminal también confesó su participación, junto con otras tres facciones de esa banda delictiva, en el frustrado atentado del subprocurador de Investigaciones de la PGJE, Alex Álvarez Gutiérrez.
El funcionario dio a conocer también la detención de un agente de Tránsito y un policía municipal de Macuspana y Cunduacán, respectivamente, que estaban al servicio de 'Los Zetas' y que presuntamente participaron en los referidos hechos criminales en esos municipios.
