
Orgullo y dedicación. Ángel Armando sale cada noche a vender sus burritos afuera de la Deportiva, donde su puesto ya es conocido para varias generaciones.
Ante la crisis, muchos laguneros han optado por salir a las calles a atender las necesidades primarias de otros, como la alimentación, y así obtener ingresos. "Toda mi infancia, que yo recuerde, la he vivido con mis abuelos y mi 'jefe'; (ellos) han estado aquí, en el negocio de los burritos", cuenta Ángel Armando Sáenz Gómez, quien a sus 19 años sacrifica la posibilidad de estudiar una carrera por atender el negocio.
No le falla
A su corta edad, Ángel es una persona muy buscada durante las noches, sobre todo los fines de semana. Con su dotación de burritos y refrescos, se instala afuera de la Unidad Deportiva de Torreón, donde tiene clientes de años, donde su puesto se ha convertido en toda una tradición (según dice, el negocio empezó un poco antes de los 90).
"Yo tengo 3 años y medio aquí. Llega bastante gente por la noche, que anda trabajando, llega de todo", dice, poco antes de atender a un taxista. El joven relata con orgullo cómo fue que su padre se inició en el negocio. "La familia necesitaba de un 'negocito' y mi papá empezó en otro lado. Se puso primero en la gasolinera, pero no le dieron permiso y se vino a la Deportiva. Estoy muy orgulloso de mi papá porque iba a las cantinas y ahí vendía los burritos, traía una hielerita. Los de aquí fueron los primeros de todo Torreón".
Por ahora, Ángel ha tenido que hacer una pausa antes de poder realizar sus sueños. Según sus palabras, él quisiera hacer reportajes, pero su exigente horario le impide estudiar una carrera. "Yo estoy desde las 10:30 p.m. hasta las 6:30 a.m., todos los días". Lunes, martes y miércoles se surte con unos 300 burritos; viernes y sábados, 500, o a veces más. "Los burritos valen 10 pesos, pero ya tienen mucho a ese precio. La gente sabe los que son buenos y los que no, cada quien tiene sus favoritos. Hay gente que viene a diario, es su cena o hasta su almuerzo". Papas verdes con deshebrada, chicharrón y frijoles con chorizo son los sabores disponibles; en fin de semana le agrega los de papas rojas y huevo con chile.
Falta regular
En la actualidad es fácil vender burritos, sobre todo afuera de alguna tienda o farmacia. Al respecto, Alberto Chavira Zúñiga, director de Plazas y Mercados en Torreón, explica que ellos buscan la forma de que no se ubiquen en la vía pública.
"Tenemos oficios del Oxxo donde solicitan que se retire a todos los vendedores de burritos de los estacionamientos de todas las tiendas, pero las personas que tienen a su cargo la administración de cada Oxxo son las que les permiten estar ahí", dice. Y añade que "en el último operativo que realizamos contra los vendedores de burritos recogimos 200 hieleras, eso fue hace casi un año, pero ahorita se debe haber incrementado, posiblemente (haya) hasta 800 burreros en la ciudad.
Requeridos
Los burritos de hielera son una opción para quienes trabajan de noche o salen con hambre de los antros. O simplemente, para quien trae antojo.
"La gente sabe los que son buenos y los que no; tiene sus favoritos. Hay quienes vienen a diario"
Ángel Armando
Vendedor de burritos
DICEN "A veces no sale nadie y se baja la venta, no se venden y a desayunar, comer y cenar burros"
Beto
Vendedor de burritos
"Ya tenemos la clientela. Hay lugares donde están más baratos, pero la gente viene por el sabor"
Carlos
Vendedor de burritos
17
PESOS
De plaza les cobra Plazas y Mercados a los 'burreros' en Torreón.
NÚMEROS
800
'BURREROS'
Aproximadamente, habría actualmente en Torreón, según un estimado.
Los guisados más populares son el chicharrón, deshebrada y frijoles.
Los precios oscilan entre los 6 y 10 pesos.
Los principales clientes son personas que trabajan de noche (como taxistas); los fines de semana son los que andan en bares y antros.
DATOS