La Leche en Polvo es considerada como una forma moderna de consumir leche, producto tan importante para la salud. Ella posee la ventaja de tener una longevidad mayor que los demás productos lacticinios, por ser deshidratada. Además de ser una forma cómoda en la alimentación de la gente, la leche en polvo es importante bajo el punto de vista económico.
Dentro de la clasificación de este tipo de leche, existen la Instantánea y la no Instantánea. De entre esas dos opciones, hay una variedad de productos que se adaptan a los diferentes gustos y necesidades: desnatado, semidesnatado, entera, sin lactosa, de soja (de entre los cuales hay muchas opciones, como desnatada, entera, con sabores, etc.). Formula Semielemental Hipoalergénica, de sabores: fruta (plátano, chocolate), enriquecida con calcio, enriquecida con omega.
Dentro de su proceso, la leche en polvo es obtenida por la retirada total del agua por medio de procesos industriales. Para que el agua (90% de la masa de la leche) sea extraída, las fábricas la hacen evaporar en un proceso lento, que no estropea las proteínas del producto.
1. Después de la selección de la materia prima hay el proceso de Filtración, resfriamiento y almacenamiento, a través del cual se remueven las impurezas groseras, manteniendo la calidad del producto. Después la leche es mantenida en estanques isotérmicos.
2. Estandarización: se ajusta el tenor de grasa en relación a los sólidos desengrasados de la leche fluida. En seguida el producto pasa por un precalentamiento para disminuir su viscosidad.
3. Clarificación: son removidas más impurezas (como los trazos de metales - provenientes de los equipamientos).
4. Pasteurización: se calienta la leche para eliminar microorganismos patogénicos y fermentativos, inactivar enzimas y permitir la formación de compuestos sulfidrílicos (potencialmente antioxidantes).
5. Concentración: es realizada en equipamientos a vacuo para disminuir la temperatura de ebullición, evitando modificaciones en la estructura de la leche. En ese proceso es eliminada cerca de 70% del agua de la leche.
6. Deshidratación: la leche concentrada es pulverizada en el interior de una cámara, en goticuelas muy pequeñas, que entran en contacto con una corriente de aire filtrada y caliente. La deshidratación ocurre de forma instantánea.
7. En seguida hay una recuperación de la mayor cantidad posible de polvo de la corriente de aire que deja la cámara de secado, por cuestiones económicas, como también ambientales.
8. Por fin, la aglomeración e instaneización: se aumenta el poder de reconstitución del polvo (como en el caso de la leche en polvo instantánea).
Para aquellas personas que se preocupan por la calidad de los productos que van a consumir es importante saber que algunas instituciones de certificación decidieron ensayar 12 marcas, entre nacionales e importadas de leche en polvo integral (instantánea y no-instantánea) tratando de verificar la adecuación de estos productos a la normatividad vigente (Ley General de Salud y Normas Oficiales Mexicanas).
Se dice que la leche en polvo sólo debe ser consumida por niños menores de un año, con indicación expresa de un médico o nutriólogo. El alimento materno evita infecciones y alergias y fortalece el vínculo entre madre e hijo. Así, el consumo de leche en polvo tiene que ser controlado y consciente, siempre considerando que la leche materna es la más adecuada para el bebé. Sin embargo, si hay supervisión médica, ciertos productos tienen especificado en sus etiquetas la edad para la cual son destinados, variando entre bebés menores de un año, como también para niños mayores de seis años. Hay tipos especializados, como la destinada a bebés prematuros.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), estudió la superalimentación de muchos bebés en los primeros meses de vida. Datos proporcionados por la OMS mostraron que las tablas de crecimiento superestimaban el peso que los bebés deberían ganar en la fase de crecimiento, lo que significa el consumo excesivo de leche en polvo. La OMS descubrió que el peso ideal para bebés de 2 años o 3 años estaba de 15% a 20% más alto en las tablas de crecimiento utilizadas por la organización. La OMS analizó 8,440 niños en seis países. El resultado mostró que los bebés amamantados apenas por leche materna son más delgados y más altos que los que toman leche en polvo, pero los científicos dicen que eso es perfectamente saludable y es la manera que los bebés deben crecer. Con ello, la superalimentación de los niños puede explicar por qué la actual generación de adultos es la más obesa de todos los tiempos.