SANTIAGO DE CHILE.- Un cartero chileno acumuló en el desván de su casa, en la localidad de Linares, a unos 300 kilómetros al sur de Santiago, más de 5,000 cartas que no entregó, como represalia a un supuesto enojo con su jefe, informa la prensa local.
El caso fue denunciado por la dueña de la casa donde se encontraba la correspondencia, quien aprovechó una demanda interpuesta por violencia familiar contra el cartero para denunciar la presencia de sacos de cartas en la vivienda, que ella descubrió al realizar unos trabajos de ampliación en el domicilio.
Agentes de la Policía se incautaron de toda la correspondencia acumulada desde 2007 por el cartero, quien se encuentra en paradero desconocido, e indicaron que había todo tipo de cartas, desde publicidad comercial y facturas hasta misivas de carácter personal.
La empresa de Correos de Chile señaló en un comunicado que ha iniciado una investigación interna para identificar al responsable de los hechos y que presentará una querella criminal en su contra por los delitos de interceptación, hurto y apertura de correspondencia.
