Un policía ministerial fue ejecutado por un comando armado hoy en Culiacán, los sicarios utilizaron armas de grueso calibre, con esta víctima suman 68 los policías asesinados en Sinaloa de enero a la fecha, y en total suman 600 los homicidios en lo que va de este 2008.
La víctima tenía por nombre José Virgen Ojeda Zazueta, 43 años, y formaba parte de la Coordinación de Robo de Vehículos de la Policía Ministerial en el Estado.
Fue asesinado en la colonia Emiliano Zapata, por la calle Plan de Ayala, cuando circulaba a bordo de una Chevrolet Silverado, color azul, placas TX-66249 de Sinaloa, cuando fue alcanzado por sujetos armados que viajaban a bordo de una pick up y en un sedán Honda y le chocaron el auto para que se parara, para luego dispararle y minutos después regresar a rematarlo, sin importar que hubiera curiosos ya viendo el cuerpo que estaba dentro de la camioneta, los cuales se hicieron un lado, porque los sicarios con palabras altisonantes los corrieron.
Apenas había recorrido tres cuadras a bordo de su camioneta, desde que salió de su casa, pero los sicarios ya lo esperaban, lo siguieron e intentaron pararlo primero, pero al no lograr su cometido dispararon.
En el lugar del crimen, los peritos de la Procuraduría General de Justicia en Sinaloa recogieron más de 100 casquillos calibre 7.62x39mm para fusil AK-47,de los llamados "cuerno de chivo".
Trascendió que este agente ministerial es primo de Faustino Ojeda, de quien se dijo era gatillero y fue muerto hace tres años en Tamaulipas.
Según consta en los archivos de la Procuraduría, el 17 de octubre del 2005 fue víctima de un atentado cuando llevaba a la escuela a su hija Reyna Fabiola Ojeda, de 17 años, cursaba en ese tiempo el segundo año de preparatoria, y quien pese a las heridas, sobrevivió al atentado, y su padre también, quien logro bajar de la unidad herido y pedir apoyo por radio a sus compañeros ministeriales.
En esa ocasión la víctima viajaba en una camioneta Ford Lobo, con placas TU-33512 de Sinaloa, unidad que recibió más de 50 impactos de bala AK-47.
Pese a que se montó un operativo y el área fue acordonada por militares, federales, ministeriales y municipales no se logró dar con el paradero de los sicarios.