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Recuerdos del Ayer

Sergio Luis Rosas

Rafael “Pelé” Padilla

Fue el entrenador Felipe Castañeda quien lo bautizó con este apodo, con el cual hizo historia en el desaparecido equipo Laguna de Segunda División en la década de los años sesentas. Además de la Ola Verde militó en el Atlante, Puebla y Tigres de la UANL, en este último club concluyó su carrera futbolística.

Originario de la Ciudad de México, surgió del futbol llanero con el equipo Perú de la colonia Asturias, habiendo sido observado por Felipe Castañeda, en ese entonces técnico del Laguna, quien lo integró al conjunto lagunero en la temporada 1962-1963 junto con el guardameta José “Chato” Sierra y el “Dedos” Garduño.

El debut de “Pelé” Padilla con la Ola Verde fue en un partido amistoso contra el León del legendario Antonio “Cinco Copas” Carbajal, a quien le anotó un gol en el cobro de un penalty para que Laguna derrotara 2-1 a los Esmeraldas, lo cual fue señal de buen augurio.

En la Ola Verde jugó durante cinco años, de 1962 a 1967, formando parte del plantel que luchaba incansablemente por el ascenso a Primera División, sus compañeros de equipo eran el portero Rubén Villalpando, los defensas Luis “Gato” Gómez, Pedro Salinas, Ramón “Mon” Romero y Celedonio Mora, los medio volantes Bulmaro Garcidueñas y Rodolfo Álvarez, los delanteros José Refugio “Coyota” Fernández, Emilio “Chero” Aldrete y Joaquín “Pato” Villarreal.

Rafael Padilla Silva, su nombre completo, reconoce que en el Laguna tuvo tres grandes maestros, Roberto “Gringa” Vega, Agustín “Cri Cri” Fernández y Enrique “Chino” Yassin, de quienes aprendió mucho. Desde su punto de vista, el mejor jugador lagunero en el futbol de Segunda División fue Roberto “Gringa” Vega, quien jugaba cualquier posición y lo hacía bien. Un futbolista versátil y gran compañero.

De su estancia en la Ola Verde recuerda con agrado los partidos sostenidos contra Petroleros de Poza Rica, Ciudad Madero y Zacatepec, que eran los mandones en la rama de ascenso en ese entonces, a los cuales siempre le ganaban en San Isidro.

Del equipo Laguna emigró al Atlante en la temporada 1967-1968, en donde tuvo de compañeros a los guardametas Raúl Orvañanos, actualmente comentarista deportivo, y a Alejandro Mollinedo; en el cuadro jugaban José “Chato” Sánchez, Rafael Hernández, los argentinos Juan Carlos Malazzo y Norberto Boggio, el brasileño Claudinor Barbosa, Eugenio Medina, José Luis Desachi, Ernesto Cisneros y Bernardo “Manolete” Hernández.

En su segundo año con los Potros de Hierro llegaron al primer equipo Rafael Puente y Juan Ignacio Basaguren, ambos comentaristas deportivos hoy en día, José Luis “Cuca” Amuchástegui, Marco Rivas Barrales, Federico “Borrego” Pérez Flores y Rafael Hernández Pat.

Con su llegada al Atlante cumplió el sueño de jugar en el Estadio Azteca, recién inaugurado en esa fecha, y que era casa de los Potros de Hierro, dirigidos por José “Che” Gómez esa temporada.

Dos años estuvo en el Atlante, de donde fue transferido al Puebla de Segunda División, al cual ayudó a ascender a Primera División en un Torneo de Promoción, celebrado después del Mundial de México 70.

Sus compañeros en el equipo de La Franja fueron el portero Ignacio Sánchez Carbajal, Fernando Zamora, Agustín “Botas” Pérez, Alfonso Sabater, Luis Enrique Fernández, “Flaco” Rebollo, Alfonso Báez y Jorge Negrete, al mando de Lucho González Gatica.

Rafael “Pelé” Padilla terminó su carrera profesional en la temporada 1971-1972 con los Tigres de la UANL en Segunda División, al mando de don Grimaldo González, quien logró conjuntar un buen equipo y lo llevó hasta la gran final contra el Atlas de Guadalajara, que resultó vencedor en la contienda, en lo que fue su penúltimo regreso a la Primera División.

En los Tigres de la UANL jugó al lado de los guardametas Gustavo Frech y José Luis Brisuela, Luis “Gallo” Langarica, Javier “Capi” Lima, Alfredo Franco, Dámaso Pérez, Gerardo “Pantalones” Lupercio y José Luis Puente, entre otros.

Al término de la temporada 1971-1972 se retiró por razones familiares, cuando aún estaba en plenas facultades, habiendo sido después entrenador de futbol durante 20 años en la Unidad Laguna de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN). También fue instructor de futbol durante 12 años en el Club Deportivo San Isidro de Torreón.

Rafael “Pelé” Padilla tuvo dos grandes ídolos en su infancia, el gambetero diabólico Alfredo del Águila y el gran filtrador Héctor “Chale” Hernández.

“Pelé” Padilla forma parte de una generación de futbolistas que luchó a brazo partido para que el Laguna estuviera en Primera División, objetivo que se logró y proyectó a la Comarca en el concierto futbolístico de nuestro país.

¡Hasta el próximo miércoles!

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