
El presidente Felipe Calderón garantizó a los mexicanos en Estados Unidos el respaldo de su Gobierno y destacó la contribución de éstos al país. Acompañado por el presidente de EU, George W. Bush, Calderón inauguró la nueva sede del consulado de México en Nueva Orleáns. (Archivo)
Pide el presidente a EU una reforma migratoria ‘comprensiva e integral’.
El presidente de México, Felipe Calderón y su homólogo estadounidense, George W. Bush coincidieron en la necesidad de impulsar la Iniciativa Mérida con la cual ambas naciones ofrezcan garantías de seguridad a sus habitantes; sin embargo, Bush -a siete meses de separarse del cargo- dejó en manos del Congreso norteamericano la aprobación y el monto del financiamiento de ese mecanismo de cooperación.
Calderón y Bush se reunieron por segunda ocasión en territorio norteamericano en el marco de la Cumbre de la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (ASPAN) en donde, junto con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, también trataron temas como la migración y el Tratado de Libre Comercio de la región.
Calderón defendió el acuerdo comercial que, dijo, ha sido señalado últimamente, pero sin el cual, aseguró, la migración a Estados Unidos se hubiera incrementado. En el tema migratorio Calderón, reclamó a Bush, trabajar de forma conjunta para lograr una solución “comprensiva e integral” al problema de los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos.
Previo a esa reunión, el secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, en su calidad de secretario del Consejo de Seguridad Nacional, firmó un convenio de cooperación con Michael Chertoff, secretario de Seguridad Interna de este país, con el fin de desarrollar tecnologías de seguridad.
Estas comprenden el intercambio de experiencias en la aplicación de tecnologías en seguridad nacional para la construcción de bases de datos biométricos, el procesamiento de solicitudes de visas, la emisión de pasaportes y los registros de entradas y salidas del país.
Los mandatarios de México y Norteamérica se reunieron en un encuentro privado por más de una hora y al término hicieron breves declaraciones a la prensa en donde Bush se refirió a la Iniciativa Mérida.
Un Bush sonriente y que no requirió de traductor pues aseguró que entendía “cada palabra” de las dichas por Calderón, señaló: “Tenemos una estrategia y estamos comenzando a implementarla. El Congreso tiene la oportunidad de enviar un fuerte mensaje de que queremos trabajar de manera cooperativa con el dinero que estará en el suplemental. Yo espero por su puesto que financien todo el programa y que financien una estrategia que será efectiva”.
El mandatario mexicano, por su parte, hizo un reconocimiento al Gobierno de Bush que, dijo, ha comenzado a tomar medidas para combatir el tráfico de armas. Sobre la Iniciativa Mérida Calderón dijo:
“Como usted mencionó, hablamos, sobre todo, del tema de seguridad. Los dos coincidimos en que queremos crear una frontera segura para nuestra gente, sobre todo, el organizar una estrategia común para enfrentar y vencer a un enemigo común como es el crimen organizado y el tráfico de drogas”.
Calderón inició su segunda visita oficial a este país en donde fue recibido primero por una banda de jazz y posteriormente, en la inauguración de las nuevas instalaciones del consulado de México en esta ciudad, con un mariachi. Ahí entregó actas de nacimiento a connacionales y después se dirigió a inaugurar la exposición del juguete mexicano – de apenas cinco por cinco metros- en el Children’s Museum, en habló de los artesanos de Michoacán y en donde, según reveló, en la pasada Semana Santa se quemaron unos “judas” –figuras de cartón con las que se simboliza el mal- en Los Pinos.
En el centro de un amplio radio de seguridad que incluyó vigilancia aérea y que cortó los accesos terrestres desde cualquier sitio, Calderón y Bush conversaron y, posteriormente, el mandatario mexicano se reunió con Harper con quien anunció, en un comunicado, la puesta en marcha de tres proyectos piloto para trabajadores temporales.
En el encuentro también hablaron del caso de Brenda Martín, acusada de “lavado” de dinero y quien está sujeta a proceso penal en Guadalajara. Al respecto Calderón dijo que el Poder Judicial de la Federación “goza de plena autonomía y confía en que se resuelva en breve conforme a derecho”.