
El mexicano Damián Alcázar personifica al malvado Lord Sopespian en Las Crónicas de Narnia.
Destaca Damián Alcázar que desde niño deseó ser un ‘guerrero’.
Cuando era niño, recuerda el actor Damián Alcázar, “me iba atrás de las pantallas de cine y me ponía a jugar a ser el personaje o los personajes de las películas, ya sea de Walt Disney o de otras. Y sí, hasta fui guerrero”.
Tuvieron que pasar muchos años y haber ganado diez Arieles por su trabajo en cine en México, para que ese niño viera hecho realidad su sueño gracias al director Andrew Adamson, quien le dio la oportunidad para debutar en una mega producción extranjera: Las Crónicas de Narnia: El príncipe Caspian, donde da vida a lord Sopespian.
“Eso de ser yo los personajes, ¡uy!, lo hice muchísimas veces. Debo decir que en Las Crónicas de Narnia le di vida a toda mi imaginación, a todas esas aventuras infantiles que tuve y tengo, porque déjame decirte que todavía sigo siendo un niño; me sentí muy bien; fue grandioso”, expresó.
Pero este niño de 55 años tuvo que aguantar un vestuario de 25 kilos, dejarse la barba y preparar lo que él califica como un personaje complejo. Pero tal fue la calidad de su tarea, que el mismo Adamson le dio un regalo.
“Fue realmente un regalo de Andrew, que es un formidable amigo. Ahora lo puedo decir, el que mi hijo (de 20 años) haya tenido una aparición en la película. Andrew dijo: ‘Bueno, que salga Emiliano aquí. Que lo vistan’. Entonces lo puso ahí, casi-casi dándome un regalo a mí”, comenta el actor de La Ley de Herodes.
“Aparece en una escena haciendo a uno de los tres guardias... Es el que está al extremo izquierdo, relata con emoción, a pesar de ser un actor que se caracteriza por cierta seriedad y enfatiza que no por haber trabajado en un filme en el que le pagaron muchos dólares, ahora se cotizará en la industria mexicana. “Jamás. Mis amigos, porque todos lo son, saben que lo que tengan se los voy a agradecer, siempre y cuando tengan una historia formidable”, señala.
-¿Cómo preparaste a tu personaje? Tiene ese toque irónico propio de los mexicanos.
De eso no me puedo alejar (de lo irónico)... Traté de crear un personaje complejo que no se viera malo desde el principio, porque entonces los malos son chatos.
Se sabe que William Moseley (Peter Pevensie), uno de los protagonistas, se refirió a Alcázar como un gran actor, al igual que el mexicano lo hizo del joven inglés.
Sin embargo, el también histrión de Un Mundo Maravilloso recuerda cómo es que de repente, en charla entre ambos en su vuelo de Los Ángeles a la ciudad de México, se habló sobre Gael García.
“William me hablaba por ejemplo de Gael. Dice que lo admira. Era muy rico que él reconociera en un muchacho como Gael, el talento que tiene y ya la trayectoria que tiene siendo tan joven. Yo le decía que nuestro actor mexicano es un muchacho muy responsable y que sin lugar a dudas llegaría a ser un grande”, comenta Alcázar, mientras agrega que el tema salió después de sugerirle al actor extranjero que si quiere dedicarse de lleno a la actuación, tiene que estudiar mucho.
Se apega ‘Susan’ a la historia
Anna Popplewell lo dice rápido: si su personaje en Crónicas de Narnia, el príncipe Caspian es distinto al anterior, es porque así lo dictaba la novela original.
La actriz que da vida a Susan, la joven mayor de los hermanos Pevensie, asegura que no tuvo nada que ver en la nueva imagen que presenta.
Ahora su personaje pelea, se enamora y coquetea.
“Es un gran cambio, lo que queríamos hacer era desarrollar al personaje tal y como estaba en el libro. Ella participa mucho en la acción y bueno, no es que comience a creer menos en Narnia, sino que se está comenzando a dar cuenta de que hay que dejarlo atrás y así sucede”, explica.
Anna descarta que, no obstante haber participado en una de las cintas más taquilleras del mundo, vaya a ser encasillada en ese papel.
“No creo, siempre hay el miedo, pero a nosotros los actores nos gusta hacer varios personajes, sólo esperamos el que nos guste. Yo tengo algunas invitaciones, pero apenas estoy leyendo cuál me convence, qué voy a hacer después”, dice.
Como sea, se dio gusto en el set de compartir experiencias con el resto del elenco, tres años después de la primera entrega. Y todos, subraya la actriz, se divirtieron.
“Nos queremos mucho... lo mejor fue estar en las escenas de batalla, ver cómo le hacían algunos para volar con arneses, que es muy difícil, y todo lo demás, fue muy divertido para todos”, destaca.