En esta sociedad aún machista, se considera al hombre más inteligente que la mujer, aunque no sea verdad, “lo que le da más derechos”, declaran las psicólogas del Instituto de la Mujer.
En el marco de la clausura del taller de Autoestima, impartido a un grupo de mujeres por las psicólogas Leslie Judith Ávila Fraire y Juanita Cedillo Valadez, se dejó en claro que todavía falta mucho por hacer para erradicar la violencia intrafamiliar ejercida por el hombre.
“Es muy difícil todavía lograr que la mujer tenga sus espacios, pues su tiempo se lo dedica a su esposo y a sus hijos y así se pasa la mayor parte de su vida y si quiere ocuparse de ella, vienen los reclamos de sus familiares”, explica Leslie Judith.
Comentan las especialistas que incluso, al inicio del taller, en marzo pasado, había cerca de 30 mujeres inscritas pero terminaron sólo siete, algunas no pudieron porque entraron a trabajar, pero a la mayoría de ellas ya no les permitieron acudir sus esposos.
“El taller aborda esa problemática, la baja estima que la mujer tiene de sí misma debido a la cultura familiar, pues desde la casa les enseñan a las mujeres que deben servir a sus hermanos y luego cuando se casan, a servir a sus esposos”, señalan las sicólogas.
El taller de Autoestima es el primero que imparte el Instituto de la Mujer, pero se pretende organizar más dentro de la institución e incluso en algunas comunidades rurales, toda vez que las mujeres que viven en los poblados tienen menos oportunidad de asistir y también requieren asesoría y apoyo.
Reconocen que poco se puede hacer para terminar con la violencia intrafamiliar mientas el hombre no acepte que actúa mal, lo cual es difícil por la negativa sistemática del varón a recibir ayuda sicológica o de terapia familiar.
Por su parte, la directora del Instituto de la Mujer, Claudia Landeros Ríos, hace la observación en el sentido de que se ha incrementado la demanda de las mujeres en esa instancia debido más que nada a la violencia física y sicológica que ejerce el hombre al interior del hogar.
