En México, la Cámara de Diputados aprobó la Ley de Sociedades en Convivencia, a pesar de que no tenía los elementos mínimos para fundarse como institución y que hubo rechazos jurídicos importantes para que fuera insertada en la legislación familiar. Se trata de una ley que formaliza la convivencia entre personas del mismo sexo para darles certeza jurídica de sus propiedades y derechos sucesorios, lo que, al decir de los diputados, ?le da a México un referente de desarrollo, de cambio, de modernidad, de tolerancia, de avance? (sic)? ley que fue aprobada, más por presión de índole política que por convicción jurídica.
A partir de esta aprobación, el Estado de Coahuila sacó la Ley del Pacto Civil de Solidaridad, con una reforma al Código Civil de Coahuila que establece un compromiso patrimonial legal entre parejas de cualquier sexo. Karla López y Karina Almaguer son la primera pareja que vinieron del Estado de Tamaulipas para utilizar dicha ley y por ello fueron llamadas ?compañeras civiles?. Coahuila les facilitó dicho trámite, a pesar de que, según los conocedores, no cumplían con los requisitos porque es una ley para los habitantes de nuestro Estado y probablemente al regresarse a Tamaulipas no va a tener efecto.
Sin embargo, cuando la firmaron, según se comentó en los medios de comunicación, el padrino fue el Subsecretario de Asuntos Jurídicos del Gobierno de Coahuila, quien, al externar ellas que pensaban que iban a tener el rechazo de la gente en Tamaulipas, él les manifestó que si esa situación ocurría, ellas tendrían las puertas abiertas en nuestro Estado y que inclusive les darían trabajo para que se vinieran a vivir acá.
Ante esa posible situación y sabiendo que Coahuila es el único Estado que cuenta con dicha ley, ¿el gobierno de Coahuila les dará trabajo a todos aquéllos que tengan el mismo problema?... y dado el aumento de la homosexualidad en nuestro país, ¿se tendrán los recursos suficientes para ello?... Es un caso para la ?araña?.