Psicólogos de la Universidad de California y de la Universidad de Hawaii, ambas en EU, han desentrañado dos de los indicadores innatos que el ser humano utiliza para evitar una relación incestuosa con sus hermanos.
Londres
Este mecanismo de rechazo, que los expertos explican en el último número de la revista científica británica "Nature", actúa en la misma medida tanto en el sexo masculino como en el femenino y se basa en el reconocimiento del parentesco con sus hermanos.
Para los psicólogos, que han llevado a cabo más de seiscientos cuestionarios para dar con estas claves, el indicador más importante para que el ser humano establezca los lazos de parentesco fraternal es el que se produce cuando ve a la persona que reconoce como su madre cuidando de un niño.
Este mecanismo no funciona en el caso de los benjamines, quienes desarrollan los indicadores de parentesco durante la etapa en la que viven junto a sus hermanos dentro de la misma casa, incluso si estos son adoptivos o no comparten con ellos alguno de los progenitores.
Según estos psicólogos, estos dos indicadores contra el incesto también los desarrollan otras especies de animales.
"Estos resultados se suman a un número creciente de estudios que muestran que los humanos no son inmunes a las fuerzas evolutivas que han desarrollado otras especies y que el darwinismo tiene un papel protagonista en el descubrimiento de la arquitectura neurológica y psicológica de nuestras especies", escriben los autores en el estudio.