
Felipe Medina camina hacia el exterior del Cereso de Torreón.
TORREÓN, COAH.- Queda libre. El ex alcalde de Matamoros, Felipe Medina Cervantes, abandonó el Centro de Readaptación Social (Cereso) y dice que su condena es injusta y que “en su momento” hará revelaciones importantes. Su abogado defensor ya apeló la resolución de la autoridad judicial.
A las 15:25 horas de ayer, Felipe Medina salió del inmueble del fraccionamiento Latinoamericano y decidió no abordar un auto Stratus rojo que lo esperaba en el estacionamiento y se encaminó a la puerta principal para encontrar a los representantes de distintos medios de comunicación, haciendo pública su inconformidad por el proceso penal que lo tuvo en prisión un año, un mes y cuatro días.
Junto con el ex edil también abandonaron el penal su hermano Javier Medina Cervantes, ex director de Egresos y Alfonso Figueroa Bautista, ex tesorero, quien también hizo un pago fraccionado.
Para recuperar su libertad, los hermanos Medina tuvieron que cubrir el pago de 220 mil pesos en efectivo cada uno y tramitar una petición para el resto del pago fraccionado de 280 mil pesos, toda vez que en el Juzgado Tercero del ramo penal está embargada una propiedad (conocida como Las Albercas), que garantiza el pago, mientras se cubren cinco mensualidades de 56 mil pesos para cada uno.
Las cantidades cubren los montos de 400 mil pesos por reparación de daño y 100 mil pesos para el beneficio de la libertad bajo caución, multas que forman parte de la sentencia de seis años de prisión y seis años de inhabilitación para ocupar puestos públicos, que dictó en sentencia, la juzgadora María Luisa Valencia García el pasado fin de semana.
Medina Cervantes, alcalde matamorense de 2002 a 2005, fue hallado culpable por el delito de peculado junto a su hermano Javier, que fungió como director de Egresos, y el ex tesorero Alfonso Figueroa Bautista. No así, Jesús Rodríguez Chavarría, que sustituyó a Javier Medina como director de Egresos, y su caso se encuentra en juicio de amparo.
Poco después de terminada la Administración, un estudio de la Cuenta Pública del Municipio encontró irregularidades basadas en la alteración de nueve cheques expedidos al dueño de una gasolinera de Matamoros, por la cantidad de 524,943.55 pesos, entre septiembre y diciembre de 2002.