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ACAPULCO, GUERRERO.- Dos cabezas humanas y cuya identidad se desconoce, fueron expuestas ayer sobre el muro de acceso a las oficinas de la Secretaría de Finanzas del Gobierno de Guerrero, ubicadas en la colonia La Garita.
Es el mismo lugar donde, el pasado 20 de abril, fueron colocadas las cabezas de dos personas, uno de ellos integrante de la Policía Preventiva de Acapulco.
Este hallazgo se dio a las 05:45 de la madrugada. Las cabezas fueron colocadas sobre un muro y debajo de ellas una cartulina fluorescente, color naranja, en la que dejaron la leyenda: “Una vez más mugrosos para que aprendan a respetar” y al final del texto una “Z”.
Una de las cabezas tenía cinta industrial alrededor de los ojos, mientras que la segunda fue vendada de ojos y boca.
Fueron colocadas en el transcurso de la madrugada de ayer viernes en dichas oficinas gubernamentales, a sólo horas de las elecciones federales.
Los dos cuerpos presuntamente de los individuos decapitados aparecieron aproximadamente a las 07:50 de la mañana en un terreno baldío del fraccionamiento Mozimba, lugar ubicado a la salida de Acapulco.
Ambos estaban envueltos, uno en una sábana color rojo y el segundo en un cobertor color azul y amarrados con cinta industrial. Uno de los cuerpos vestía pantalón blanco.
La colonia La Garita es el lugar donde, por segunda ocasión, fueron expuestas dos cabezas, además ha sido el escenario donde se han dado los hechos más violentos y sangrientos registrados en el puerto.
El primero fue la balacera del 27 de enero entre policías preventivos de Acapulco y cuatro presuntos narcotraficantes, estos últimos murieron. El enfrentamiento se dio con armas de grueso calibre y quedó una camioneta incinerada con la explosión de una granada.
El segundo hecho fue el 20 de abril cuando dos cabezas fueron dejadas sobre un muro de las oficinas de Finanzas del Gobierno Estatal, debajo de éstas una cartulina, color rojo, donde se leía la advertencia “para que aprendan a respetar”.
También horas después y a pocos metros de distancia, aparecieron los cuerpos envueltos en bolsas de plástico. Una de las cabezas encontradas ese día pertenecía al policía preventivo de Acapulco, Mario Núñez, quien participó en la balacera del 27 de enero entre policías y narcotraficantes.
El 25 de mayo sujetos fuertemente armados emboscaron al comandante de la Policía Investigadora Ministerial, Alfredo Camacho Millán, quien quedó gravemente herido y murió días después.
Uno de sus escoltas fue ejecutado en el lugar de los hechos, tres elementos más quedaron heridos.
