México, (EFE).- Los reos mexicanos mayores de 70 años que por su edad o estado de salud no puedan continuar en la cárcel, cumplirán su condena en casa gracias a un convenio celebrado por el ombudsman mexicano y el ministerio de Seguridad Pública.
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes, y el ministro Ramón Martín Huerta suscribieron el acuerdo que beneficiará a 204 reos federales, aunque aclararon que no será aplicable a quienes estén condenados por secuestro o delincuencia organizada.
"Está claro que en todo momento se debe actuar con apego a la ley (...), pero los adultos mayores enfrentan un estado de indefensión progresiva y ya no representan un riesgo para la sociedad o para las víctimas", señaló Soberanes.
Puntualizó que además de la edad, los requisitos para purgar penas en domicilios serán que el centro penitenciario demuestre la incompatibilidad de las condiciones de la persona con la sanción, que no esté en posibilidades de volver a delinquir y que no haya sido condenado por delincuencia organizada o secuestro.
En abril de 2004 el Congreso mexicano aprobó reformas de ley para que las personas de más de 70 años que sean sentenciadas por algún delito puedan cumplir la condena en su domicilio, a fin de que no pasen la última etapa de su vida tras las rejas y también para abatir la sobrepoblación en las cárceles.
Sin embargo, no todos los legislativos estatales han adecuado sus leyes a este ordenamiento.
Ante ello el ombusdman mexicano hizo un llamado a los congresos locales para que todos los adultos mayores puedan recibir, con las excepciones de ley, una pena sustitutiva.