UNA LETRINA O UNA LETRITA
Entre una letrita y una letrina hay una pequeña gran diferencia: pequeña porque es de sólo una letra y grande por el significado tan distinto entre una cosa y otra.
La letrina es el baño, donde se satisfacen necesidades fisiológicas que todos hacemos pero que no nos gusta que nos vean hacerlas. La palabra letrina es una forma contraída de lavatrina que literalmente es el lugar donde uno se lava. ¿Y por qué se contrae la palabra? Pues no sé. Tal vez porque cuando uno va al baño también se contrae... En cambio, la letrita es eso: un pequeño símbolo para escribirlo como representante de un sonido, a menos que se refiera a una “letrita de cambio”, un documento que el deudor deberá pagar dentro de un plazo perentorio.
¿Qué significa perentorio? Pues que perece en una fecha determinada o sea que tiene fecha de vencimiento. Pero no nos desviemos porque luego van a decir que somos unos desviados. Veamos algunos otros ejemplos de los muchos que hay y en los que, cambiando una letra podemos decir algo totalmente diferente.
Hojear con h es pasar las hojas por ejemplo de un libro. Y uno dice: “Le voy a quitar la hache a ver qué pasa” y la hache no dice nada porque es muda.
Pero si le quitamos la “h” al verbo hojear, ya no se refiere a las hojas sino a los ojos. Ojear es echarle un ojo a algo. Por ejemplo, a la vecina guapa que anda regando el jardín con ropa muy veraniega.
Espirar con “s” tiene un significado totalmente diferente a expirar con “x”. Espirar es lo contrario a aspirar. Aspirar es introducir aire por ejemplo a los pulmones y espirar es la acción contraria, o sea arrojar el aire, echarlo fuera.
Expirar en cambio es colgar los tenis, entregar el equipo o dicho más a la mexicana, petatearse. ¿Por qué petatearse? Porque antes, a los muertitos, cuando no había para comprar un ataúd, los enrollaban en un petate como si fuera una especie de taco mortuorio y así se les daba cristiana sepultura.
Veamos otro caso: grabar con b grande es labrar una superficie. Puede ser de metal o de madera, por ejemplo y gravar con v chica es imponer un tributo, o sea un impuesto, que se llama así precisamente porque se impone, libre y voluntariamente a fuerza. Al impuesto que se grava, por esa misma razón se le llama también gravamen.
Un caso más: cegar con “c” y segar con “s”: la primera es quedar sin vista o quitarle la vista a otro, mientras que segar significa cortar la mies, cosechar los cereales.
Y a propósito de cegar me acordé de aquel viejo y sabio refrán que dice: Está bien que el amor es ciego, pero los vecinos se dan cuenta…
POR SI LAS DUDAS
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Pregunta: Alejandro Hernández es un pimentoso jarocho que dice que le gusta jugar “pelota caliente”, o sea que practica el llamado “rey de los deportes”, el beisbol, y me reclama por qué cuando hay dos juegos en un mismo día, se anuncia “doble juego”. Doble serían dos juegos exactamente iguales, ¿no te parece, amigo?
Respuesta: Fíjate que tienes razón, Alex. Si lo tomamos en el estricto sentido de la palabra, doble se refiere a dos cosas exactamente iguales. Insisto, si lo tomamos con un poco de rigor, deberían anunciarse “dos juegos”.
FRASE LOCA… DE REMATE
El amor es un sentimiento que nos inspira los más grandes proyectos… y luego nos impide realizarlos.