SUN-AEE
México, DF.- Es imposible decir qué tan loco será el nuevo video de Molotov. Vestidos con batas blancas en un laboratorio de secundaria técnica, los rockeros mexicanos explican: ?Somos cuatro doctores en busca de un marciano, mejor dicho del personaje adecuado para hacer una coreografía sobre marcianos?.
Durante un día completo, Molotov grabó el video de Marciano, versión en español y tropicalosa de I turn into a martian, del grupo de punk Misfits. Pero el video de este segundo sencillo del álbum Con todo Respeto quedará listo hasta dentro de dos semanas, ya que fue grabado en blue screen.
Es decir que el marciano y la escenografía se agregarán en posproducción con computadora. Por eso, el guitarrista Tito comenta: ?El video está tan loco que no sabemos cómo será?.
Pero sí saben que es dirigido por Chicle y Rodrigo Valdés, y que la coreografía es de Víctor Acevedo Salazar.
Además, también están pensando ya en las canciones de su nuevo álbum con una promesa: volver a hacer letras de contenido social y político.
?Este disco de Con todo Respeto fue un pequeño descanso que aprovechamos para jugar con covers de algunas canciones. Pero ya es tiempo de regresar a lo nuestro?, dice Tito.
Contento porque abrirá el concierto de Los Beastie Boys en Monterrey, Nuevo León, y posteriormente viajarán a España para una pequeña gira, Molotov se dice un grupo más maduro.
?Tendrá otra temática, porque el grupo está otra etapa?, dice Micky Huidobro, el vocalista y bajista de la banda.
Molotov espera grabar este nuevo disco en cuanto regresen de España, cuya gira termina con su presentación en el Festival Viña Rock el 30 de abril.
?Hace tiempo que no vamos a España, hubo un pequeño bache pero queremos reencontrarnos con el público de allá?. asegura Tito.
El nuevo disco saldrá a la venta para finales de año y aunque todavía no tienen ninguna canción completa, prometen que será un álbum muy crítico: ?La mayoría del pueblo vamos contracorriente, no creo que nadie esté a gusto con este gobierno. En este país la vida no es sencilla y nuestras letras no pueden hablar sino de lo que vivimos?