El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- Pocos son los actores que llevan una carrera exitosa como directores, alternando las dos profesiones del medio con satisfacción, la mayoría no pasa de dirigir una sola película convirtiéndose en la burla de los críticos y algunas veces hasta del público, pero como en todo existen excepciones y Clint Eastwood es una de ellas.
Al principio de su carrera Eastwood sólo era un actor rudo destinado a papeles en cintas de acción interpretando al anti héroe de todas sus historias, inclusive se convirtió en un icono del género Western con películas como El Bueno el Malo y el Feo, además también se convirtió en icono del cine policiaco con su papel de Harry el Sucio.
Pero su carrera dio un giro inesperado cuando comenzó a dirigir películas, al principio no se le auguraba mucho en esta rama ya que dirigió cintas de acción muy del estilo de las que siempre hacía él como actor, pero cuando dirigió Bird allá por los años ochenta dio muestra del posible talento que tenía.
Fue hasta 1993 cuando despuntó enormemente como director al presentar el film; Los Imperdonables, ganó un Oscar y alternó su carrera como actor y director de forma satisfactoria desde ese momento.
Sus películas abarcan varios géneros, pero siempre con un palpitante corazón humano en el centro de la narrativa, Golpes del Destino no es la excepción e inclusive se puede considerar su obra maestra.
Aquí se cuenta la historia de Maggie (Hilary Swank) una mesera de 31 años, que aspira boxear profesionalmente. Frankie (Clint Eastwood) es un entrenador veterano, competente, pero temeroso de exponer a sus boxeadores en peleas de alto riesgo. Maggie quiere que Frankie la entrene, pero él la considera demasiado vieja para comenzar una carrera en ese deporte. No obstante, luego de mucha insistencia, Frankie acepta y, para su sorpresa, Maggie resulta tener gran talento, lo que le permite ascender rápidamente en el ranking local, y luego internacional, hasta que llega la oportunidad soñada: una pelea por el título mundial en Las Vegas.
Como en la mayoría de las cintas de Eastwood, el corazón humano de los personajes está al descubierto y dejan mostrar muchos sentimientos, al comenzar la película y durante su primera hora de duración todo parece indicar que no es más que otro filme deportivo con tema de superación en donde una deportista fracasada, en este caso una boxeadora, asciende estrepitosamente en su disciplina para al final de la historia ser la mejor.
Tal vez la trama comienza así y siempre nos da la impresión de que no veremos nada nuevo, pero el señor Clint Eastwood le da un giro a la trama bastante inesperado y triste, para de esa manera brindarnos una vez más una historia con un desenlace triste y desesperanzador.
La maestría del director se pone al descubierto no sólo en las imágenes y en el desarrollo de la historia sino también en la dirección de actores, las actuaciones solventan más una historia que por sí sola ya tenía bastante a su favor. Hilary Swank brinda una actuación sublime, es por eso que ganó el Oscar este año y por este papel en específico, repitiendo el premio que ya había conseguido en 1999 por su participación en la cinta Los Muchachos no Lloran.
Morgan Freeman no se desentona para nada con su actuación tan entrañable y aunque no fue el mejor tuvo una participación muy destacada, pero sin duda quien se lleva la película además de Swank es Clint Eastwood que demuestra no sólo que es un estupendo director sino también un muy buen actor que ha pasado de interpretar personajes rudos para interpretar gente con un gran corazón humano como lo es el personaje de esta cinta.
La fotografía y la música le agregan un plus a este filme que se aprecia bien en todos los aspectos; actuación, dirección, fotografía, ambientación y música incidental, como dato extra la música está compuesta por Eastwood quien demuestra su gran versatilidad artística al dominar la mayoría de los aspectos técnicos y artísticos de una producción, comparándose con autores como Charlie Chaplin y Orson Welles que se adentraban en todo los aspectos de sus cintas.
En conclusión Golpes de Destino es una estupenda película entrañable y muy bien hecha que tocará las fibras más sensibles de todos los espectadores.
DATOS
Título original: Million Dollar Baby.
Elenco: Clint Eatwood, Hilary Swank, Morgan Freeman.
Director: Clint Eastwood.
Calificación: **** 1/2
En dos palabras: Entrañable y triste
Mínimo * Máximo*****
