Roma, (EFE).- Los ritos ligados al satanismo aumentan cada día más, así como las peticiones a los sacerdotes para que realicen exorcismos, según especialistas religiosos que participan en Roma en un curso sobre esta materia, organizado por los Legionarios de Cristo.
Los religiosos advierten sobre un creciente interés de la sociedad por el ocultismo y las prácticas satánicas, en buena parte realizadas de manera "casera" y no vinculadas a las sectas satánicas, de las que en Italia existen unas cincuenta.
Sin embargo, los expertos reunidos en el curso "Exorcismo y oración liberadora", advirtieron de la necesidad de mantenerse alejados de los ritos ocultistas y de quienes los practican.
El obispo italiano de Isernia y conocido exorcista, Andrea Gemma, aseguró que la práctica de esos ritos ocultistas es una de las vías por las que el demonio "puede entrar con mayor facilidad en el alma".
El ocultismo está de moda
El ocultismo, el deseo de acercarse a lo esotérico, a lo misterioso, está muy extendido, también entre los jóvenes, que pueden verse empujados hacia los ritos satánicos, advirtió.
El rector del ateneo Regina Apostolorum, de los Legionarios de Cristo, Paolo Scarafoni, donde se desarrolla el curso, señaló que en la sociedad actual la gente cree que recurrir al demonio puede facilitar la solución de sus problemas, lo que unido "al uso de sugestiones" de tipo ocultista y satánico "denota un descenso del nivel cultural".
El curso de exorcismo, que este año celebra su segunda edición, está abierto por primera vez a los laicos, entre ellos catequistas, médicos, psiquiatras o abogados, aunque los ritos para expulsar al demonio de un cuerpo están reservados a los obispos y los sacerdotes designados por ellos.
Los expertos también denotaron un incremento de las peticiones a los sacerdotes para realizar exorcismos, aunque Scarafoni indicó que sólo un caso de cada diez de presunta presencia del demonio puede ser realmente una posesión.
Poder maligno
El sacerdote y exorcista Gabriele Nanni, aseguró que "con frecuencia" no se trata de verdaderas posesiones que requieren la intervención de un profesional, pero que demuestran que "la presencia del maligno es muy fuerte".
Nanni consideró que "podemos decir que las posesiones son la punta de la pirámide, pero detrás no está el vacío; por el contrario la actividad del diablo puede afectar a cualquiera".
El exorcista es quien debe entender la situación y enviar a la persona con problemas reales a un especialista médico o psiquiátrico, a la vez que debe ocuparse de los raros, pero siempre más frecuentes, casos de posesión, explicó.
La ciudad de Roma cuenta con nueve exorcistas, que cada semana reciben una decena de peticiones de personas que se creen poseídas por el maligno, aunque los casos verdaderos son una veintena al año.
Asunto serio
El obispo Gemma advirtió de que todos estos temas deben tomarse absolutamente en serio y puso en guardia a los jóvenes que bromean sobre ellos, jugando a invocar a los espíritus.
Sin embargo, explicó que antes de llegar al exorcismo se debe recurrir al diálogo, la oración, el examen de conciencia, la visita a los médicos o psiquiatras y a los sacramentos.
Posesión demoniaca
Algunos de los rasgos que pueden indicar una verdadera posesión demoniaca son, según la Iglesia Católica, la capacidad de hablar o entender lenguas desconocidas, de rebelar cosas ocultas o lejanas o tener una fuerza superior a la normal.
Estos signos son sólo indicios, por lo que hay que recurrir a otras señales, sobre todo de origen moral y espiritual para verificar la posesión, como puede ser la aversión a Dios y su palabra o a los sacramentos.