Agencia Reforma
CULIACÁN, Sinaloa.- La Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), atrajo ayer las investigaciones de la fuga de nueve reos del penal de Culiacán y trasladó a la Ciudad de México a 28 servidores públicos, incluyendo al director del penal, Alfredo López Reyna, para ser investigados sobre los hechos.
Rafael Contreras Labra, delegado de la PGR, informó ayer que por órdenes de José Luis Vasconcelos, titular de la SIEDO, serán los agentes federales quienes determinen la situación jurídica de los celadores que se encontraban de guardia el jueves cuando se fugaron nueve internos del penal.
Entre los reos que se fugaron se encontraba Francisco Javier Flores Villarreal, quien participó presuntamente en la balacera en la que murió el narcotraficante Rodolfo Carrillo Fuentes y su pareja sentimental.
“Vino un grupo especial de la SIEDO y estas personas recibieron el expediente y se hicieron cargo del asunto, ellos recibieron instrucciones por la clase de personas que se fugaron ellos sintieron la necesidad de llevarse el expediente”, dijo el delegado.
“Son ellos quienes tendrán que resolver la situación jurídica obviamente de algunas personas y decidir si se liberan o no a los custodios y decida lo correspondiente en torno a los funcionarios, uno de los cuales es el director del penal (Alfredo López Reyna)”.
En total fueron trasladados a México 24 custodios, el director del penal, el titular del Departamento de Seguridad del penal, Jorge Andrés Mariscal Burgueño, y los comandantes Miguel Santa Cruz, de la Policía Ministerial y Martín Delgado Quezada, de la Policía Estatal Preventiva. Estos tres últimos encargados del operativo de búsqueda de los reos.
El delegado de la PGR dijo que tras una revisión de expedientes después de algunas horas se logró saber que cinco reos de los que se evadieron estaban internos por delitos federales y el resto que son cuatro por ilícitos del fuero común, entre los que se encuentra el secuestro y el homicidio.
“Hicimos una revisión de expedientes y en las primeras indagatorias se nos había informado que ocho de los presos que se habían evadido estaban internos por delitos contra la salud y otros delitos federales, pero después se concluyó que no era así que eran cinco y los otros eran del fuero común, precisó,
“Pero el dato que uno de los fugados participó en la balacera del 11 de septiembre de 2004, donde resultó muerto el narcotraficante Rodolfo Carrillo Fuentes es correcto, sólo que sólo la SIEDO sabe cuál fue su participación”.
En entrevista antes de su traslado, el director del Penal de Culiacán advirtió la posibilidad de la complicidad de personal de custodios de la penitenciaría, motivo por lo cual dijo, 24 celadores son investigados por la PGR.
El funcionario estatal no descartó que los reos se hayan fugado no sólo brincándose la barda con sábanas, como fue informado al momento, e incluso dijo que podrían haber salido por la puerta principal.
Reveló que desde el mes de marzo se habían recibido denuncias sobre la posibilidad de una fuga y desde esa fecha se solicitó el apoyo de las corporaciones de seguridad del estado y federales.
Mientras el director de Prevención y Readaptación Social de Gobierno del Estado, Ramón Raymundo Fierro Ruiz, informó que en sustitución de López Reyna, director del Penal de Culiacán, de manera interina estará Joel Eduardo Sotomayor Valdez, y en el área de seguridad, el subcomandante David Romero Aguilar.
