En 2020 hubo 210 mil 100 nuevos casos y se registraron 57 mil 984 fallecimientos. (EL SIGLO DE TORREÓN)
De acuerdo con el Observatorio Mundial del Cáncer, Globocan, la incidencia de cáncer de mama en América Latina y el Caribe para 2020 fue de 210 mil 100 nuevos casos y se registraron 57 mil 984 fallecimientos. Para Carlos Murillo, presidente de Pfizer en América Latina, la pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto considerable en el abordaje temprano no solo del cáncer de mama, sino del cáncer de mama avanzado.
Si bien “no está claro cómo la pandemia ha afectado a quienes luchan contra otras enfermedades graves como el cáncer de mama, lo cierto es que esta patología sigue siendo la segunda causa de muerte por cáncer en América Latina y el Caribe”.
La detección y las decisiones terapéuticas tardías han contribuido a un empeoramiento de la enfermedad, lo que disminuye las posibilidades de recuperación y la tasa de supervivencia.
Por esta razón, “hemos impulsado acciones para medir el impacto de la pandemia a nivel regional sobre el cáncer de mama avanzado, para comprender los programas que los países tienen en la materia y organizar debates informados con gobiernos que contribuyan a mejorar las condiciones de diagnóstico y acceso a opciones terapéuticas oportunas, para muchas mujeres que están en la plenitud de su vida y a las cuales no debemos, por ningún motivo, dejar atrás” agregó Murillo.
Por su parte, el doctor Luis Alberto Suárez, director médico de Oncología para América Latina de Pfizer, señaló la inminente necesidad de atender los requerimientos que son evidentes en las mujeres de la región, pues entre el 6 y 10 por ciento son diagnosticadas en etapa tardía.
Destacó que desde hace años han desarrollado diversas iniciativas que contribuyen a mejorar la experiencia de las mujeres, sin importar la condición y lugar donde se encuentren. En este sentido, desde el 2015 se implementó la campaña regional “Cada Minuto Cuenta” con el objetivo de alertar sobre el sentido de urgencia alrededor de este tema.
La campaña impulsa 5 medidas para cerrar las brechas de detección y tratamiento oportunos:
- Duplicar la supervivencia global media para el 2025.
- Contar con un sistema de información epidemiológico robusto y confiable que permita tener datos precisos para mejorar los resultados de salud.
- Maximizar la calidad de vida en la práctica clínica.
- Aumentar la disponibilidad y el acceso a la atención multidisciplinaria.
- Integrar tecnologías de educación y capacitación para el correcto abordaje de esta patología.