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WASHINGTON, EU.- La Cámara de Representantes fue cerrada ayer al informarse que había un intruso armado en un edificio cercano del Congreso, pero posteriormente se reanudaron las sesiones al conocerse que las causantes eran dos integrantes del personal con un revólver de plástico y un disfraz del Día de Brujas.
Terrance Gainer, jefe de policía del Capitolio, dijo que las responsables eran “dos integrantes del personal que trajeron disfraces de Halloween”. “No creo que tuvieran malas intenciones”, agregó, y no prevé que se presenten cargos en su contra.
El incidente duró dos horas o menos, pero desató una respuesta masiva de seguridad en una época de temores por el terrorismo. Policías fuertemente equipados entraron al edificio de oficinas Cannon House en busca de los sospechosos.
Gainer dijo que dos mujeres que trabajan en el lugar se detuvieron a conversar con agentes de seguridad después de colocar una bolsa en la banda de inspección de rayos X, a la entrada del edificio, y luego entraron. Momentos después los agentes vieron la imagen de un arma en una pantalla de vídeo y dieron la alarma.
El personal de seguridad se desempeñó “bien dentro de los estándares (de operación)” y las dos asesoras del personal “lamentaron mucho lo que pasó”, dijo Gainer.
El incidente hizo recordar un suceso mortal ocurrido el 24 de julio de 1998, cuando un hombre con antecedentes de enfermedad mental entró rápidamente al Capitolio y mató a dos guardias. El tirador acusado, Russell E. Weston hijo, espera ser sometido a juicio.
El representante republicano John Shimkus contactó a la policía del Capitolio para reportar que sus ayudantes eran las dos personas que las autoridades buscaban. El personal de seguridad fue a toda prisa a la oficina y se enteró del disfraz y la pistola de juguete. La oficina de Shimkus rechazó identificar a las dos ayudantes y no se presentaron cargos.
“Creo que nadie intentaba engañar”, dijo Gainer. “Pienso que sólo fue un conjunto inusual de circunstancias relacionadas al Halloween que nos ocurrieron hoy”.
Shimkus dijo que las integrantes de su personal no se percataron que eran las sospechosas hasta que la policía del Capitolio dijo que buscaba a una mujer.
“Desafortunadamente esto fue un malentendido, resultado de los esfuerzos de mi personal para armar un disfraz de Halloween durante su hora para ir a comer”, afirmó en un comunicado para disculparse.
