MOSCú, RUSIA.- El gas usado en el rescate de rehenes en un teatro de Moscú estaba basado en Fentanyl, un derivado del opio de rápido efecto y de varios usos médicos, informó ayer el principal funcionario de salud de Rusia.
El anuncio lo hizo el ministro de Salud Yuri Shevchenko, según las agencias de noticias Interfax e ITAR-Tass.
Agregó que la sustancia era un anestésico y que no es capaz de causar la muerte.
“Por sí mismas, estas sustancias no pueden surtir un efecto mortífero”, dijo Shevchenko según Interfax.
El anuncio pareció ser un intento de contrarrestar las críticas, especialmente del exterior, de que el gobierno ruso estaba siendo demasiado hermético al no divulgar información sobre el gas usado en el rescate de los rehenes el sábado.
Los críticos denunciaban que al no divulgar la información se estaba provocando la muerte de rehenes que sobrevivieron al rescate pero que se encontraban graves.
Por lo menos 117 rehenes murieron por el gas.
Pero Shevchenko dijo que los rehenes murieron porque después de su odisea estaban escasas de oxígeno, deshidratadas, hambrientas, incapaces de moverse adecuadamente y bajo fuerte tensión psicológica.
“Son precisamente estos factores los que causaron la muerte de algunos de los rehenes”, dijo Shevchenko.
El gas tenía como fin impedir que los rebeldes activaran los explosivos que tenían sujetos en la cintura y plantados en diversas partes del teatro. Ello funcionó, pero afectó también a la mayor parte de los rehenes.
El embajador de Estados Unidos en Moscú, Alexander Vershbow, dijo que la falta de información de las autoridades rusas “incrementó la confusión creada luego de que terminó la operación de rescate de los rehenes”.
“Es claro que quizás con un poco más de información al menos unos cuantos más de los rehenes hubieran sobrevivido”, dijo.
El doctor Thomas Zilker, profesor de toxicología de la Clínica de la Universidad de Munich, dijo ayer que muestras de orina de dos alemanes que estaban entre los rehenes presentaban rastros de halotano, un gas usado como anestésico. Dijo pensar que el gas bombeado al interior del teatro podría haber tenido también otras sustancias.
Los rebeldes tomaron el teatro, con más de 800 personas adentro, el 23 de octubre, para exigir que el presidente ruso Vladimir Putin retirara a sus tropas de la república separatista de Checenia, donde se inició la más reciente guerra de 1999.