Decir que anda uno “a la vuelta y vuelta” es una forma de expresar que va uno de un lado a otro, tal vez resolviendo muchos pendientes o haciendo una gran cantidad de cosas a la vez. “Tengo que hacer unas vueltas…” le dice el señor a su esposa, y ella entiende que tiene que ir a diferentes lugares, probablemente al banco a hacer una transacción, luego a pagar el recibo de la luz y después otras actividades por el estilo… no creo que nadie entienda que literalmente se va a poner a dar vueltas sobre su eje, porque se va a marear y se puede caer, además de que no tendría mucho caso hacerlo, a menos de que se dedicara a ser bailarín.
“Vamos a dar la vuelta” es la frase que usamos para decir que vamos a pasear, a algún parque o a un centro comercial, lo cual es muy común en mi ciudad porque, con el calor que hace normalmente, es más cómodo pasear en el aire acondicionado dentro de un mol. Por cierto, ¿sabe usted qué es mol? Bueno, claro que es un centro comercial con muchas tiendas, unas grandes y otras chiquitas… pero la palabra mol, ¿de dónde viene? Mol es una palabra que no es aceptada por la Real Academia Española, pero que como quiera usamos adaptándola del inglés mall, o incluso así se usa también en inglés.
En el siglo XVI en Italia existía un juego parecido al cróquet, que consiste en golpear unas bolas con un mazo. En italiano, este juego tenía el nombre de pallamagio, que significa palla, pelota y magio martillo o mazo. Este juego pasó al inglés con el nombre de pall-mall y se jugaba en un espacio reducido digamos, un callejón o pasillo al que los ingleses le fueron llamando simplemente mall, hasta que se le quedó el nombre. Muchos años después, el concepto de las tiendas tipo mall recibió este nombre por los pasillos que existen entre las tiendas.
Y ya que nos dimos una vuelta por el mall¸ volvemos a la palabra vuelta, que también le podemos llamar revolución. Una revolución es un giro o una vuelta que da una pieza o alguien sobre su eje; vemos este concepto frecuentemente en los motores de combustión interna, en los que se mide la cantidad de “vueltas” que da el mecanismo del motor, pistones, cigueñal, etc, por cada minuto.
Una revolución es también un cambio profundo, normalmente violento, de alguna estructura política, por ejemplo… cuando se quiere “dar la vuelta” a las cosas porque no están funcionando y hay mucha resistencia para hacerlo, se produce una revolución. De ahí nos llegan también las palabras como “revolver” o “revoltoso”, que éste último es el que produce revueltas, o sea que “alborota la gallera”, un rebelde que está en contra de un sistema determinado y quiere cambiarlo a como dé lugar.
En el mundo se han dado una gran cantidad de revoluciones que han marcado la historia de la humanidad, aunque existen algunas de ellas que francamente parecen inventadas. En un comentario posterior le platicaré sobre algunas de estas curiosas revoluciones, pero por el momento, es mejor que me despida de usted, antes de que me acusen de revoltoso. ¡Hasta luego!
Soy Don Juan Recaredo… compártame sus dudas y comentarios, [email protected], Twitter: @donjuanrecaredo.
ME PREGUNTA: ¿Cómo es mejor decir? ¿Visité los Estados Unidos o visité Estados Unidos?
LE RESPONDO: En algunos casos, el uso de artículo antes del nombre del lugar es opcional, así que de las dos maneras es
correcta. El artículo no es parte del nombre del país, en este caso, por lo que no se escribe con mayúscula a menos de que
sea el inicio de la oración. En otros casos, el uso del artículo es obligatorio porque forma parte del nombre, como el caso
de La Habana, El Salvador, entre otros.
LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA: Frase de Mariano Azuela: “La revolución es el huracán, y el hombre que se entrega a ella ya no es el hombre, es la miserable hoja seca arrebatada por el vendaval”.
