El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, señaló que pese al incremento de contagios del COVID-19 que se registra en últimas semanas en la entidad no se debe generar alarma entre la población, toda vez que se mantienen bajo control los indicadores sanitarios respecto a la hospitalización y los fallecimientos.
Al terminar la reunión semanal del Subcomité de Salud de La Laguna, el gobernador se refirió a las últimas cifras de contagios del COVID-19, además de la preocupación que ha generado entre los diversos sectores sociales la aparición de la llamada variante Delta en Coahuila y entidades vecinas como Durango.
Riquelme admitió que al menos en la última semana sí se han registrado más contagios nuevos del COVID-19, especialmente entre los grupos poblacionales que aún no se encuentran cubiertos con sus respectivas vacunas, aunque dicha situación no ha impactado en los hospitalizados y fallecidos, tal como sí pasó en 2020 y previo al proceso de vacunación.
"Sí hay casos, pero no tenemos hospitalización y no tenemos muertes tampoco, eso nos permite tener o tomar decisiones claras para el futuro, para no equivocarnos, porque ustedes están viendo en otras entidades que empiezan a salir casos y se asustan, es lógico, sí, pero no tienen el análisis que nosotros tenemos y que es realmente cómo está impactando y la actividad económica qué tiene".