Habitantes del ejido El Dólar, el cual se encuentra a escasos metros del borde del Río Aguanaval, dicen que no consideran un riesgo cuando llega el agua, al contrario para los matamorenses es un gran espectáculo, pues por las tardes las familias acuden para pasar un rato de esparcimiento. (MARY VÁZQUEZ)
Habitantes del ejido El Dólar, el cual se encuentra a escasos metros del borde del Río Aguanaval, dicen que no consideran un riesgo cuando llega el agua, al contrario para los matamorenses es un gran espectáculo, pues por las tardes las familias acuden para pasar un rato de esparcimiento.
Incluso mencionaron que, tenían la intensión de proponer a las autoridades que emparejaran un terreno que hay al lado en donde se encuentran unos enormes pinabetes para que la gente pudiera instalarse a gusto en su día de campo, ya que dicen muchos llegan al “bajar el sol” y hasta se llevan alimentos disponerse a “tomar el fresco” un rato, pero cuando no lleva agua, hay personas que van con vehículos racer.
La asistencia de personas genera alguna derrama económica, pues acuden a las tienditas a buscar refrescos, agua o frituras.
“Nomas viera, en la tarde se viene todo Matamoros aquí al puente” dijo la señora María de los Santos, quien al tiempo que platica junta la parte superior de los dedos de una de las manos, para indicar que son muchas las personas que llegan para permanecer por un rato a la orilla del río.
La mujer, platica, siempre ha vivido en esa zona y hay que resaltar que el ejido El Dólar se encuentra en parte baja y casi al lado se encuentra el río, pero del otro lado pasa un pequeño canal de riego, incluso asegura no temerle cuando el río cuando “crece” puesto que pese a que está muy cerca el agua no se desborda, pero dice que si le teme al canal, ya que si no regulan el agua en la compuerta, aunado a la acumulación de ramas y troncos, es latente el riesgo de que el agua se desborde y se inunden las viviendas.
