La Comisión Europea (CE) propuso un conjunto de medidas para revertir el deterioro de los sumideros de carbono naturales en la Unión Europea, que solo entre 2013 y 2018 perdieron un 20 % de su capacidad de absorber CO2. (ESPECIAL)
La Comisión Europea (CE) propuso un conjunto de medidas para revertir el deterioro de los sumideros de carbono naturales en la Unión Europea, que solo entre 2013 y 2018 perdieron un 20 % de su capacidad de absorber CO2.
Bruselas pretende restablecer los sumideros en la próxima década a través de una acción "inmediata y decisiva", una idea que forma parte de la hoja de ruta para descarbonizar la UE presentada hoy.
Según la propuesta de la CE, el deterioro se debe, entre otros motivos, al envejecimiento forestal, a los desastres naturales y a la falta de incentivos políticos y financieros.
Tampoco ayuda el hecho de que la agricultura y el uso de la tierra estén cubiertos en la UE por legislaciones diferentes.
Otro problema identificado tiene que ver con el control de la aplicación de las políticas, por lo que se propone mejorar el seguimiento de las emisiones y de la absorción de CO2 para comprobar el progreso de los estados.
Con los cambios planteados, Bruselas quiere garantizar un enfoque integrado para incentivar la formulación e implementación de políticas efectivas.
Para ello, plantea revisar el Reglamento que regula el uso de la tierra y la silvicultura, con el fin de dar a los países incentivos más potentes a la hora de mejorar esos sumideros.
En particular, habla de establecer objetivos vinculantes para que los países aumenten la absorción neta de carbono en el sector forestal y de uso de la tierra para el período entre 2026 y 2030.
También apunta a un objetivo a nivel europeo para alcanzar la neutralidad climática en el sector del uso de la tierra, la silvicultura y la agricultura para 2035, incluidas las emisiones agrícolas distintas del CO2, como las del uso de fertilizantes y la ganadería.
El comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, dijo en rueda de prensa que los bosques tienen un papel fundamental a la hora de alcanzar las prioridades del Pacto Verde y para la adaptación al clima y la mitigación del cambio climático.
Consideró que la futura Política Agrícola Común, acordada hace pocas semanas, "será una oportunidad para dar un apoyo más dirigido" a los silvicultores y al desarrollo sostenible de los bosques.
Con su propuesta, la Comisión propone avanzar hacia un marco político más integrado que cubra las actividades relacionadas con la agricultura, la silvicultura y el uso de la tierra, bajo una herramienta de política climática más allá de 2030.