Después de un aparente arreglo entre trabajadores y una distribuidora local de refrescos gaseosos embotellados, la empresa despidió este miércoles a siete de los empleados que encabezaron el movimiento inicial de protesta. (SERGIO A. RODRÍGUEZ)
Después de un aparente arreglo entre trabajadores y una distribuidora local de refrescos gaseosos embotellados, la empresa despidió este miércoles a siete de los empleados que encabezaron el movimiento inicial de protesta.
La empresa que distribuye las gaseosas de la marca Pepsi, firmó el día previo un convenio con los trabajadores para que levantaran el primer paro, acordando que no habría represión contra los líderes del movimiento laboral.
El pasado lunes medio centenar de trabajadores de la empresa ubicada en ciudad Frontera realizaron un paro para solicitar elecciones para nombrar una mesa directiva de su sindicato, y remover al secretario general actual.
Pidieron también el despido del director de recursos humanos de la compañía.
Luego de negociaciones con la parte patronal, los trabajadores se reincorporaron a las labores productivas tras firmar un acuerdo.
Sin embargo este miércoles a media mañana siete de los trabajadores habrían sido notificados de su despido por órdenes de la dirección de la compañía.
Personal de la Secretaría del Trabajo del gobierno del Estado acudió a las instalaciones de la compañía, que se encontraba nuevamente en paro por la rescisión de los contratos de varios trabajadores.
El funcionario del gobierno informó que levantaría un acta de los hechos y asistiría legalmente a los inconformes.
Por otro lado un notario público local, Benigno Gil de Los Santos, fue contratado por la distribuidora de refrescos para que diera fe del paro realizado por los trabajadores.
El fedatario indicó que fue informado por los paristas que siete de sus compañeros recibieron la notificación de su despido a media mañana, en plena jornada laboral.
El resto de los trabajadores se levantó en un nuevo plantón de brazos caídos al exterior de la distribuidora, como protesta por la violación al convenio recientemente firmado entre los empleados y la parte patronal.
Elementos de la Policía Municipal de Ciudad Frontera vigilan el movimiento laboral. patrullan el exterior de las instalaciones y el área donde están los paristas.
