Leonardo Aguilar se hizo su primer tatuaje, la sesión tardó nueve horas, y para el cantante fue una experiencia muy significativa, pues se trata del rostro de su abuela Flor Silvestre, fallecida el pasado 25 de noviembre. (ESPECIAL)
Leonardo Aguilar se hizo su primer tatuaje, la sesión tardó nueve horas, y para el cantante fue una experiencia muy significativa, pues se trata del rostro de su abuela Flor Silvestre, fallecida el pasado 25 de noviembre.
A través de su cuenta de Instagram, el hijo de Pepe Aguilar compartió la obra de arte, el rostro de su abuelita, quien fuera una cantante y actriz mexicana de la época de oro, intérprete de la música ranchera y esposa de Antonio Aguilar.
Leonardo, de 21 años, posteó una foto del tatuaje, y confesó que cuando lo vio no pudo evitar derramar lágrimas, al recordar a su amada abuela.
"Ahora si! Les quiero enseñar mi primer tatuaje. Esto significa muchísimo para mi. Sé que saben lo grande que es mi abuelita Flor para mi, y cuanto la amo. En mi cuarto después de terminar la pieza se me volvieron a salir las lagrimas al verlo. Le quiero agradecer INFINITAMENTE a @chueyquintanar por esta obra de arte que llevaré por siempre conmigo. A @clemente_310 por ayudarme a planear y organizar el día, a @rudy_chee_ruiz por ayudarnos durante las 9 horas de sesión, y a @pepeaguilar_oficial por presentarme a todos ellos jajajajaja", escribió.
Desde que falleció Flor Silvestre, su hijo Pepe Aguilar, y sus nietos Leonardo y Ángela, no han dejado de recordarla a través de sus publicaciones en redes sociales.
"Dejó el ejemplo de ser voz matizada de la belleza de ser madre y esposa, dejo la alegría de presenciar belleza que piensa y habla, siente y comparte, belleza y voz de mujer en el mundo y para el mundo y que, sin embargo, no deja que el mundo la aleje de su casa", escribió Pepe Aguilar para acompañar el video de un documental dedicado a Guillermina Jiménez Chabolla, el nombre real de Flor Silvestre.
Tras la muerte de la actriz y cantante Guillermina Jiménez Chabolla, mejor conocida como Flor Silvestre, surgieron las comparaciones con su nieta Ángela Aguilar, quien no sólo le heredó el talento vocal, sino también la belleza.
Flor Silvestre, quien construyó un legado de más de medio siglo, le dio el ejemplo a su nieta, pues comenzó su carrera siendo aún menor, tenía 13 años cuando cantó por primera vez con mariachi. Mientras que la joven, hoy de 17 años, comenzó su carrera en la infancia de la mano de su padre, Pepe Aguilar. Cuando apenas tenía nueve años, junto a su hermano Leonardo, lanzó su primer disco llamado Nueva tradición.
Inconscientemente Ángela incluso posa de forma similar a como lo hizo su abuela en los años 60, cuando fue protagonista de decenas de películas de la época de oro del cine mexicano. En total Flor Silvestre participó en 72 cintas para el final de su carrera.
La mirada de ambas cantantes es muy parecida, mientras que el mentón y la forma del labio inferior son rasgos que comparten.
