Enseñanza y amor por el Séptimo Arte

Entre los fotogramas de su infancia, Vanessa Espinosa recuerda que su abuelo materno era amante del cine. "Va a sonar un tanto cliché, pero es la realidad".  

Esa herencia se impregnó en su conciencia y se dio cuenta de que ella también amaba el séptimo arte.

Espinosa nació en Ciudad de México, luego se trasladó a Ciudad Altamirano, Guerrero y finalmente llegó a La Laguna, lugar donde reside desde hace más de 20 años y estudió comunicación en la Universidad La Salle.

Fue en Guerrero donde, a través del medio radiofónico, se encargó de un espacio dedicado al cine. Desde ese momento se nutrió del séptimo arte, a partir del nacimiento de su hija, cuando Vanessa laboraba como encargada de las relaciones públicas en una empresa de La Laguna: "Como Chavela Vargas, los laguneros nacemos donde se nos da la gana".

Vanessa siempre ha sido una persona muy visual su camino estaba por revelarse.

"Nace mi hija y dije que era momento de un cambio. Yo quería dedicarme a otras cosas, a lo visual. Entonces dije: 'Vamos a darnos la oportunidad'. Y fundé lo que era Plasma Casa Editorial y nos dedicábamos a la publicidad".

En ese tiempo, Vanessa tomaba esporádicamente cursos de cine. Fue en esos encuentros donde conoció a más cinéfilos e hizo contactos. La idea alumbró un día en su oficina: "Bueno, ¿por qué no hago un taller de cine".

Lejos de verlo como un negocio, la implementación del taller cinematográfico fue alimento para nutrirse a sí misma. El proyecto comenzó en el Museo Arocena, con la participación de Luis Solares. "Pero lo hacíamos de manera esporádica, porque mi negocio era la publicidad".

Cuando la ola de violencia azotó a la región, Vanessa tuvo que cerrar su negocio y trasladarse a su casa. Más tarde, se involucró en un proyecto para producir televisión a través de una asociación. Lamentablemente, dice haber caído con la persona equivocada y de repente se vio inmersa en bancarrota.

"Yo estaba en la depresión de no me está yendo bien económicamente, de manera personal mi relación está por los suelos. Los hijos están creciendo. Yo estaba realmente muy deprimida".

Entonces, un video del empresario chino Yack Ma le dio la inspiración necesaria para dedicarse a lo que sabía hacer, al cine, a la logística y a la producción. Volvió a implementar un talle y el éxito le instó a repetirlo. El sendero estaba claro. "Entonces tomo la decisión de dedicarme cien por ciento al cine y fundo Plasma en Corto".

Vanessa indica que 2019 fue un momento clave para Plasma en Corto, pues a finales de ese año registró la marca. Y desde entonces no se ha detenido. La clave del éxito, dice, ha sido el trabajo.

"Plasma en Corto ha ido creciendo como la espuma y cada día he buscado que los maestros, que los talleristas tengan la suficiente capacitación y capacidad pedagógica para poder impartir clases, y no solamente laguneros, sino buscar gente de otros lados, capaces, que estén viviendo y en primera línea en la industria".

Al momento, Plasma en Corto cuenta con alumnos en Estados Unidos gracias a las clases en línea. Vanessa Espinosa menciona que esto último también fue un reto tremendo. "Aún y con pandemia crecimos un montón".  

FUTUROS PROYECTOS

El próximo taller de Plasma en Corto se titulará Introducción a la animación de películas y efectos visuales y será impartido por Leticia Maycotte, partícipe en la película Spider-Man: Into the Spider-Verse (ganadora a Mejor Película Animada en los Premios Oscar 2019), mañana sábado 13 y el domingo 14 de marzo en las instalaciones de la Preparatoria Prefema (avenida Río Nazas y calle Palomas, colonia Villas Jacarandas). Se pueden pedir informes al teléfono 871 612 9499. Cabe mencionar que Leticia Maycotte también fue alumna de Plasma en Corto.

Espinosa también indicó que en el último módulo del Diplomado de Guion, contará con la presencia de Jorge Estrada, egresado del Centro de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la UNAM, director de la película animada La Revolución de Juan Escopeta (2011) y nominado al Premio Ariel por esa cinta.

"Otro de los planes que están truncados por la pandemia, es que mis alumnos van a poder ir a Ciudad de México a hacer prácticas. ¿Por qué? Porque ellos tienen que ir conociendo y tienen que romper el estigma de "me da miedo irme". Eso pasa mucho. También está la cuestión de que sus papás los suelten. Hay que ir donde está el cine, Ciudad de México es uno de esos sitios".