¿Deberían las empresas pagar un sueldo más alto a los graduados de universidades de prestigio? En un estudio sobre los universitarios recién graduados, se encontró que las calificaciones del desempeño de estudiantes de universidades de mayor rango superaron a sus pares de universidades de menor rango solo en un grado limitado.
Para algunas empresas, la diferencia entre un graduado de una universidad “media” frente a la de una “superior” puede valer un sueldo más alto que estos candidatos de la universidad “superior” suelen recibir. Pero para otras, el costo añadido puede no dar un rendimiento positivo de la inversión y no esté justificado.
En el estudio, se probó la relación entre el rango universitario y el rendimiento de los graduados. Se hizo un seguimiento en 79 países a 28, 339 estudiantes de 294 universidades ubicadas entre las mejores de todo el mundo. Se observó el desempeño de los estudiantes durante dos meses, trabajaban en equipos virtuales globales en proyectos de consultoría empresarial de la vida real. No solo se midió la calidad de la producción, sino una amplia gama de competencias duras y blandas que incluyen cooperación con los miembros del equipo, liderazgo, dominio del idioma, habilidades técnicas, inteligencia emocional, creatividad y otras más.
Después de comparar la edad, el género y el año de estudio, se determinó que los graduados de universidades de mayor rango tuvieron un mejor rendimiento, pero solo nominalmente y solo en algunas dimensiones de rendimiento. Específicamente, el rendimiento global mejoró solo un 1.9 %.
Hay varias razones por las que los graduados de las mejores universidades tuvieron un rendimiento algo mejor que los de las escuelas de menor rango. La primera fue la selección: las universidades de mayor rango generalmente eligen a quien aceptar entre un grupo grande de solicitantes, ello conduce a una competencia más pronunciada y una mayor calidad de la clase entrante. Los datos del estudio comprobaron la hipótesis de selectividad, los estudiantes de universidades de mayor rango tienen mejores resultados en pruebas generales de capacidad cognitiva, tienen más experiencia internacional, mejor dominio del inglés y mayor inteligencia cultural. Sin embargo, estas competencias pueden haberse alcanzado antes de su formación y, por lo tanto, no es resultado de sus estudios universitarios.
En segundo, se supone que las universidades de mayor rango proporcionan un entorno académico más estimulante que afecta positivamente la autoeficacia, la motivación, el esfuerzo y la ética laboral. Pero la educación no solo se basa en conferencias de celebridades y seminarios, tener profesores notables y estar alrededor de compañeros inteligentes, altamente motivados y orientados al logro. En este estudio, los graduados de universidades de menor rango mostraron un nivel igual de motivación y ética laboral, por lo que esto podría verse más afectado por la personalidad y otros factores individuales.
A pesar de su rendimiento general ligeramente mejor, la contratación de graduados de instituciones de alto nivel podría tener una desventaja. Los datos sugieren que los estudiantes de universidades de mayor rango podrían dañar la dinámica del equipo ya que tienden a ser menos amistosos, son más propensos a los conflictos y tienen menos probabilidades de identificarse con su equipo.
En particular, los graduados de universidades de alto rango tienden a compartir una identidad común entre ellos y podrían verse a sí mismos como diferentes de los miembros de su equipo de universidades de rango inferior, y esta categorización social puede conducir a una dinámica perjudicial de nosotros-vs.-ellos. Como resultado, los graduados de las mejores universidades podían ser percibidos por sus compañeros de trabajo de otras universidades como arrogantes y esnobistas. Sin embargo, los estudiantes de universidades de más prestigio tienden a ser más modestos en sus autoevaluaciones que algunos de sus compañeros de instituciones de menor rango.
Entonces, ¿A quién contratar? Teniendo en cuenta la creciente brecha entre las competencias adquiridas en la universidad y la preparación para el empleo, cualquier ventaja modesta en el desempeño derivada del rango universitario podría mitigarse mediante la capacitación en el empleo. Tomando en cuenta que los empleadores ya invierten recursos significativos en la formación de nuevos empleados, esa formación puede ser un factor mucho mejor que el rango de la universidad de la que procede el contratado.
En gran medida, la respuesta dependería también de las demandas específicas de empleo. ¿Requiere el trabajo un mejor desempeño de una universidad de mayor rango donde incluso una mejora del 2% en el rendimiento es críticamente importante y compensa cualquier diferencia salarial? ¿O pueden cumplir los criterios de rendimiento los graduados de universidades de menor rango? Para tomar la decisión más estratégica, un gerente de recursos humanos debe conocer la respuesta a esta pregunta antes de ver en qué universidad se graduó el candidato.
Fuente: Global Business Studies, EUA, Universidad de Carolina del Norte, EUA, Universidad Bozen-Bolzano, Italia y Universidad de Mazerata, Italia. www.degerencia.com
