Para recordar. Las personas de MasterChef hicieron un brindis por la llegada de 2021.
La noche del pasado viernes en la cocina de MasterChef los participantes y jueces recibieron el Año Nuevo con la misma temática de temporada con tres retos en donde la preparación estrella fueron los profiteroles en dos distintas presentaciones.
En esta emisión, Anette Michel anunció el primer reto que fue preparar el mayor número de profiteroles por participante siendo el ganador y con una ventaja adicional el que más piezas presentó. En este reto, la consistencia y perfecto sabor vainilla sería el factor a calificar.
Para esta prueba, el chef José Ramón Castillo, anunció la presencia de tres reconocidos chefs considerados la crema y nata de la pastelería en México, Alan Espinoza, Irving Quiroz y Alejandro Lechuga, quienes asesoraron y dieron sus mejores consejos en este primer reto individual a los cocineros.
En esta prueba, Itzel fue la ganadora y para el siguiente reto obtuvo el beneficio de formar a los tres equipos, siendo la villana de este capítulo al integrar a su equipo a los mejores en manejo de repostería y dejando a sus contrincantes en la cuerda floja tratando de sacar la mayor ventaja posible.
En el equipo uno estuvieron Erubiel, Soldado, José Luis y Meche. En el dos estuvieron David, Atilana, Oswaldo y Litzy, finalmente el equipo tres de Itzel lo integró con Rolando, Adriana y Salime.
Para este reto tuvieron la compañía de dos invitadas especiales Sofía Aragón y M'Balia, además de Diego y Alana, quienes son los encargados de todo el contenido en redes sociales y fueron invitados a formar parte de este reto, Diego fuel el elegido por Itzel para cocinar mientras que Alana permaneció generando contenido digital.
Este reto se trató de hacer un croquembouche que midiera más de 30 centímetros siendo el vencedor el equipo que terminara más rápido además de cumplir con el requerimiento de que cada uno de los profiteroles tenía que estar relleno de crema pastelera. En este reto una vez más los experimentados chefs Irving, Alejandro y Alan, asistieron a los tres equipos.
Nuevamente, Itzel logró su cometido con la malicia que la caracterizó en esta emisión al ser su equipo el ganador y el beneficio de subir al balcón a pesar de que a consideración de los tres chefs, en sabor, el equipo amarillo tenía ese punto a favor.
Para el reto de eliminación quedaron en la cuerda floja Oswaldo, David, Lytzi, Soldado Esquivel, Erubiel, Atilana, Meche y José Luis.
En voz del chef Herrera, el ingrediente que los salvaría fue lomo de cerdo, considerado una proteína noble para cocinar, aunque debían de tener principal cuidado en la cocción del mismo y presentar un platillo digno de Año Nuevo.
Cuando los chefs Betty, Joserra y Herrera, degustaron cada uno de los platillos llegaron a la conclusión de que ninguno había cumplido con los altos estándares de la cocina de MasterChef y con ello los participantes fueron merecedores de una fuerte llamada de atención al no afrontar mayores retos ni aportar grandeza en sus preparaciones y, en consecuencia, su pronta salida de la competencia.
Finalmente, para sorpresa de todos, la noche del pasado viernes tampoco hubo eliminado y aunque hubo reto de eliminación los jueces decidieron dar "borrón y cuenta nueva", empezando "de cero".
