Como parte de las medidas de prevención contra el COVID-19, el acceso al Cañón de Fernández está prohibido hasta nuevo aviso.
El pasado fin de semana, alrededor de 300 personas intentaron ingresar al parque estatal Cañón de Fernández en distintos tipos de vehículos, pero se les prohibió el paso como parte de las medidas contra el COVID-19, aunado a la preservación de la flora y la fauna de la zona.
El director de Ecología y Medio Ambiente en este municipio, Abel Ramos, dio a conocer que durante el sábado 26 y el domingo 27 de este mes se reportó mayor asistencia en el Área Natural Protegida, pues alrededor de 300 personas intentaron ingresar, entre ellas se regresaron a 35 automóviles, 8 motocicletas y 3 vehículos todo terreno.
Explicó que se continúa con el operativo de vigilancia en las entradas del parque estatal Cañón de Fernández, restringiendo la entrada a los ciudadanos a fin de respetar las indicaciones por el Decreto Estatal, a fin de evitar en lo posible los contagios por COVID.
Asimismo, el titular de dicha Dirección comentó que una de las entradas con mayor afluencia de gente fue la del ejido Santa Anita, pero ante la vigilancia establecida no pudieron hacerlo, toda vez que ya con anterioridad se informó sobre la prohibición de acceder a la zona.
Las únicas personas que ingresaron al Cañón de Fernández, con previo aviso y permiso, fueron integrantes de la organización Pro Defensa del Nazas, con el objeto de hacer inventario de aves que se localizan en ese lugar, una de las actividad que se realiza año con año.
"Recordamos que los espacios públicos como el parque estatal Cañón de Fernández, sigue cerrado al público hasta nuevo aviso", reiteró el director de Medio Ambiente y exhortó a la ciudadanía a respetar el Decreto del Gobierno estatal por motivo del COVID-19.