Varias comunidades en los Alpes austríacos suspendieron las pruebas masivas de coronavirus el domingo y se instó a otras a hacer lo mismo después de que una tormenta arrojó grandes cantidades de nieve y generó alertas por posibles avalanchas. (ARCHIVO)
Varias comunidades en los Alpes austríacos suspendieron las pruebas masivas de coronavirus el domingo y se instó a otras a hacer lo mismo después de que una tormenta arrojó grandes cantidades de nieve y generó alertas por posibles avalanchas.
En algunas partes de la provincia de Tirol cayeron 70 centímetros (27.5 pulgadas) de nieve del viernes al sábado, y se esperaban otros 110 centímetros (43 pulgadas) el domingo, informó la agencia de noticias APA de Austria.
En Tirol Oriental, 500 hogares se quedaron sin luz después de que árboles derribaron cables eléctricos, mientras que la advertencia de avalancha alcanzó el nivel 5, el más alto. En Tirol del Norte, el nivel de alerta era 4.
Las vecinas Italia y Suiza también emitieron advertencias de avalancha. “La seguridad de la población es la prioridad”, dijeron las autoridades.
Austria inició el viernes un programa voluntario de pruebas masivas con el que espera evitar confinamientos prolongados y estrictos en el futuro. Las pruebas rápidas comenzaron en Viena y en las provincias de Vorarlberg y Tirol, en el extremo occidental de país.
En los dos primeros días, se realizaron unos 300,000 tests entre casi 9 millones de austriacos. El gobierno prevé realizar millones de pruebas para mediados de diciembre.
Las pruebas son parte de la estrategia de Austria para frenar la propagación del coronavirus mientras una serie de restricciones que comenzaron el 17 de noviembre expiraron el domingo.
El canciller Sebastian Kurz dijo que se mantendrán cerrados los restaurantes, bares y hoteles hasta el 7 de enero, pero se permitirá esquiar a partir del 24 de diciembre. Las escuelas se reabrirán en su mayoría, al igual que las tiendas, museos, bibliotecas y otros negocios no esenciales.
Austria ha reportado hasta ahora más de 300,000 infecciones por coronavirus y 3,800 muertes.
