Una boda planeada para cumplir con el distanciamiento social y la cuarentena de la novia. (INTERNET)
Lauren Jimenez y Patrick Delgado, de 29 y 27 años respectivamente y que viven en Ontario, California, se comprometieron en mayo de 2019 luego de 4 años juntos. Planearon su boda para 2020 pero debido a la pandemia por coronavirus, se vieron forzados a cambiar de fecha en tres ocasiones. Es por eso que cuando Lauren dio positivo por COVID, decidió no aplazar de nuevo la ceremonia y mejor ingeniárselas para continuar con el casamiento de una forma segura.
La novia debía permanecer en cuarentena tras haber sido diagnosticada con el virus apenas unos días previos a la ceremonia, así que era vital no violar el distanciamiento social, para evitar contagios, recogen los medios locales.
Así que el pasado 20 de noviembre, Lauren se colocó en la ventana del segundo piso de la casa de su madre, mientras que Patrick estaba parado debajo, en el patio. Para simbolizar su unión, ataron a sus muñecas una cinta de casi 10 metros de largo adornada con flores.
La fotógrafa del evento, Jessica Castellano, dijo que fue “la boda más 2020" en la que le haya trabajado.
"Si logramos superar el 2020, Patrick y yo podemos superar lo que sea. Sé que Patrick y yo nos reiremos juntos sobre lo alocado, único y diferente que fue nuestro día de bodas. Definitivamente compartiremos esta historia con nuestros hijos y nietos algún día", dijo a su vez Lauren.
