El tradicional coso de la colonia Moderna ha sido anfitriona de las más grandes figuras del toreo mundial, incluyendo a Manolete. (ARCHIVO)
La tradicional y hoy, desafortunadamente en desuso, Plaza de Toros Torreón - Valente Arellano, cumplió ayer 86 años de su magna inauguración, lo que fue todo un suceso en esta ciudad y en el norte del país.
DE MUCHA HISTORIA
Enclavada en la Colonia Moderna, la Plaza de Toros Torreón llegó para acoger a numerosos aficionados que ansiaban por un lugar digno para la Fiesta Brava, luego de que habían sido instalados diversos escenarios taurinos en la ciudad, pero de una manera tanto "improvisada" y con plazas móviles. Ya para la década de 1930, la población en Torreón se encontraba en gran crecimiento y constante recepción de nuevos ciudadanos, por lo que necesitaba mayores entretenimientos, construyéndose así la plaza, en su momento de las mejores y más modernas del país, por su estructura isóptica prácticamente perfecta para la visibilidad desde cualquier punto, además de los corrales perfectamente ubicados y palcos a nivel de ruedo.
Para la esperada corrida inaugural, celebrada el domingo 25 de noviembre de 1934 a las 15:00 horas, se lidiaron seis toros de la ganadería de San Mateo, divisa rosa y blanca, por parte de los matadores Fermín Espinosa "Armillita Chico" y Francisco Martín "Curro" Caro, en una tarde donde la plaza se llenó "de bote en bote", describió la crónica de El Siglo en la edición del día siguiente. Hoy, lastimosamente, la Plaza de Toros Torreón está en desuso, con la prohibición de los festejos taurinos en el estado de Coahuila, su utilidad se ha reducido a funciones de lucha libre, que también están suspendidas, debido a las restricciones sanitarias.
