En La Laguna se han dado por canceladas las celebraciones de Halloween, los festejos en honor a San Judas Tadeo tendrán vigilancia especial y prácticamente se han descartado las peregrinaciones a la Virgen de Guadalupe, en el marco del repunte de contagios del COVID-19 que tienen hasta ayer martes a la región en un 80 por ciento de hospitalizaciones a causa del virus.
Así lo informaron autoridades del Subcomité Técnico de Salud de La Laguna, quienes advirtieron que los niveles de camas ocupadas por contagiados de COVID-19 han alcanzado ya un grado "preocupante", pues de las 336 disponibles en la región, ya están en uso 268 camas.
En ese contexto el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, advirtió que se aumentará la vigilancia sanitaria para evitar aglomeraciones, especialmente en aquellos giros en los que se estén generando mayores contagios. Para ello se determinó declarar en sesión permanente al Subcomité Técnico de Salud en La Laguna, cuyos integrantes habrán de analizar las rutas de contagio y de esa forma poder tomar determinaciones sobre posibles cierres y suspensión de actividades de forma temporal.
"Vamos a endurecer las revisiones de las actividades que en este momento están trabajando por la reactivación económica y vamos también a incrementar el número de inspectores, para poder abarcar todas las actividades que tenemos ya ahorita dentro del comercio y de la reactivación económica", informó.
Riquelme detalló que sigue "firme" la instrucción de mantener cerrados los panteones durante los días 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, además de que las celebraciones relacionadas al Halloween deben ser evitadas, así como las aglomeraciones por la festividad de San Judas Tadeo.
Para ello montarán operativos de prevención en todo el estado y especialmente en La Laguna, pero el gobernador apeló a la colaboración de los padres de familia, a quienes les pidió "cuidar a sus hijos", evitando que salgan a pedir dulces, o bien, a reuniones sociales en las próximas semanas.
