Tras la muerte del legislador Joel Molina, las pruebas serán obligatorias en el recinto.
Hasta el momento, las pruebas PCR para detectar COVID-19 a trabajadores y legisladores habían sido voluntarias. A partir del fallecimiento de un senador y de que otros tres resultaron contagiados en la misma semana, dichas pruebas serán obligatorias, dijo el presidente de la Mesa Directiva, Eduardo Ramírez.
El legislador dijo que se había dejado a criterio y responsabilidad de los legisladores la determinación de hacerse o no la prueba, y reconoció que no se habían aplicado medidas obligatorias, como sí se hace en la Cámara de Diputados desde hace más de dos meses, porque en esta sede no trabajan tantas personas como en el Palacio de San Lázaro.
"Sí se tomaron decisiones, el tema es que el examen lo dejamos opcional, no fue una decisión radical ni obligatoria sino una responsabilidad de cada uno. En mi caso, me hice las pruebas y he salido negativo, pero hay quienes han venido a sesionar o trabajar y lo han dejado de un lado", señaló.
La semana pasada se confirmaron con COVID-19 los senadores Verónica Delgadillo y José Alberto Galarza, ambos de MC, y Guadalupe Saldaña, del PAN. El sábado se reportó la muerte del legislador Joel Molina (Morena) también por esa enfermedad. El domingo, los coordinadores se reunieron y acordaron medidas más estrictas para prevenir contagios entre trabajadores y representantes populares.