El Gobierno letón amplió este martes la obligación de usar tapabocas a determinados lugares públicos. (ARCHIVO)
El Gobierno letón amplió este martes la obligación de usar tapabocas a determinados lugares públicos, impuso un máximo de 30 personas para reuniones privadas bajo techo y restringió los horarios de apertura de bares y restaurantes y el número personas por mesa.
El primer ministro, Krisjanis Karins, dijo que las nuevas restricciones que entrarán en vigor en los próximos días están dirigidas a ralentizar los contagios de COVID-19 afectando lo menos posible la actividad económica.
La obligación de usar tapabocas ya regía para pasajeros del transporte público y a partir de mañana se extenderá a los comercios, los centros comerciales, los supermercados, las oficinas de correos, las estaciones de tren, las paradas de autobús, los museos, las bibliotecas y los centros religiosos.
A partir del viernes los bares y los restaurantes deberán cerrar a medianoche y no podrá haber más de cuatro personas por mesa, a menos que vivan bajo el mismo techo. Hasta ahora el límite era de ocho personas por mesa.
Por otro lado los alumnos de entre 7 y 12 años deberán tener clases virtuales durante una semana cuando regresen de las vacaciones escolares de otoño que duran del 19 al 23 de octubre.
Los niños de hasta 13 años no están obligados a llevar tapabocas en ninguna parte.
Además se anunció la prohibición de competiciones deportivas aficionadas, así como encuentros de coros o grupos de danza. Las actividades deportivas al aire libre siguen siendo permitidas.
Las autoridades sanitarias letonas registraron hoy 75 nuevos casos de COVID-19. Los nuevos contagios han venido aumentando desde comienzos de septiembre y el 9 de octubre alcanzaron un máximo de 137.
