La policía continúa investigando el caso. (INTERNET)
En Viena, Austria, un sujeto de 31 años y jefe de una empresa fue acusado de intentar prenderle fuego a un empleado ‘porque no estaba satisfecho con su rendimiento en el trabajo’.
Según los medios locales, el sábado pasado el hombre de origen sirio presuntamente aventó gasolina sobre uno de sus empleados, un joven de 28 años, y trató de prenderle fuego.
Un tercero intercedió y el jefe no logró su cometido, así que escapó. La policía lo detuvo más tarde y el sospechoso aceptó que hubo una discusión, debido a que no estaba contento con la baja productividad del otro, pero negó haberle echado gasolina encima o intentado prenderle fuego. El caso se sigue investigando.
