En las comunidades de la Zona Indígena de Durango persisten múltiples carencias. (EL SIGLO DE TORREÓN)
La pandemia de COVID-19 acentuó la desigualdad en el sector educativo y dejó en evidencia la marginación que persiste en comunidades rurales, indígenas y en la periferia de las ciudades.
Específicamente en las comunidades indígenas de Durango, fue muy complicado continuar con el ciclo escolar, una vez que se suspendieron las clases presenciales; y existe preocupación por el anuncio de que todo el nuevo ciclo 2020-2021 sea virtual, por la falta de conectividad y el analfabetismo.
Perfecto Ciriano Flores, habitante de la comunidad indígena de Santa María de Ocotán y dirigente de la CNC, expuso que desde que se suspendieron las clases presenciales, los profesores encargaron múltiples tareas pero no todos los alumnos las pudieron realizar. Y, aunque muchos docentes buscaron la forma de dar seguimiento a sus alumnos, otros desaparecieron "y siguieron cobrando".
"Con todo respeto, como padre de familia, me preocupa porque he estado viendo que inician las clases virtuales el 24 de agosto, pero en la Zona Indígena no funciona porque allá nadie tiene internet ni computadoras. Más bien eso le funciona a la clase alta", refirió.
Además, el exdirector de Cultura de Mezquital, refirió que entrar a internet representa un gasto que las familias no están en condiciones de absorber. "Hay internet en algunas tiendas pero se tiene que pagar una ficha de 20 pesos por una hora, además de que los niños viven muy dispersos", indicó.
ANALFABETISMO
Por si fuera poco la falta de internet, la mayor proporción de analfabetismo se registra en la Zona Indígena, donde según datos del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), el porcentaje de la población de 15 años y más que no sabe leer ni escribir llega al 25 por ciento, lo que implica que cinco mil 613 son analfabetas, entre las cuales están muchos de los padres de los niños en edad escolar.
Al respecto, se refirió que tienen la fortuna de haber accedido a estudios por lo que sí pudo ayudar a su hija a hacer sus tareas, pero pudo observar que muchos de sus compañeritos no las realizaron ya que sus padres se encuentran en ese sector de la población que no sabe leer ni escribir por lo que no están en condiciones de apoyarlos.
"Yo le pido nuestros gobiernos que se haga algo extraordinario en Zona Indígena porque hay muchos niños que no avanzaron", dijo.
Sobre la determinación de que todos los niños pasarían de grado por la pandemia, dijo no se tiene certeza de que todos cuenten con los conocimientos que necesitan para acreditarlo. Hay niños que ni siquiera aprendieron a leer pero pasaron a tercero.
Dijo que si las clases se vean por televisión tampoco es accesible para los niños por lo que consideró necesario que se analicen estrategias como la posibilidad de dar clases en la zona indígena en grupos de cinco, sobre todo en el caso de los alumnos cuyos padres no saben leer ni escribir.
Y pidió que se aproveche la radio indígena para que se transmitan a través de las distintas lenguas, lo que sí representaría un auténtico beneficio para los alumnos de las comunidades.