Entre el 50 y el 60% de la población ha sufrido alguna vez de Parálisis del Sueño.
Entre el 50 y el 60% de la población ha sufrido alguna vez de Parálisis del Sueño. Ocurre cuando se está quedando dormido o se acaba de despertar, se puede oír y ver lo que hay alrededor, pero sin capacidad de moverse, prácticamente paralizado (a) sensación de lo más angustiante, por no se sabe si se está dormido o despierto y es una experiencia aterradora para algunos.
No tiene ningún riesgo para la salud y es una falta de sincronización entre la fase del Movimiento Ocular Rápido (REM por sus siglas en inglés) y la relajación muscular. Cuando se entra en la fase REM el cerebro sigue activo, pero los músculos se relajan por completo. Al sufrir una parálisis del sueño, esta sincronización falla y se despierta antes de tiempo cuando el cuerpo aún está relajado y no puede moverse.
Este fenómeno entra dentro de los trastornos del sueño o parasomnias, donde también se encuentran el sonambulismo y los terrores nocturnos. No hay de qué preocuparse, porque remite en unos segundos o como mucho se alarga a unos minutos, pero quien lo sufre percibe esos segundos como eternos.
Tampoco hay que hacer nada especial para que la parálisis se pase, ya que el cuerpo se encarga de movilizar de nuevo sus funciones habituales cuando se da cuenta de que está despierto y ha salido de la fase REM antes de tiempo.
¿CUÁLES SON SUS CAUSAS?
1. Puede ser síntoma de una enfermedad como la narcolepsia y aunque no es una enfermedad frecuente, hay que tratarla cuanto antes porque disminuye considerablemente la calidad de vida de la persona.
2. No se descarta el factor genético y es importante revisar el historial familiar si hay más personas que sufren este trastorno.
3. La mayoría de las veces viene por la respuesta a una circunstancia puntual de privación o alteración del sueño. Como cuando se viaja frecuentemente y se cambia de horario bruscamente es una de esas circunstancias, pero también pasarse toda la noche bajo estrés laboral o de estudio que puede llevar a la noche siguiente a tener uno de estos episodios tan angustiosos.
4. Las personas que trabajan de noche o con guardias de muchas horas, en las que tienen que permanecer despiertos durante mucho tiempo porque también están entre el grupo de personas que más trastornos del sueño sufren.
5. El uso excesivo de estimulantes, fatiga física, cambios significativos en la rutina también llevan a este trastorno.
Según la causa que provoque la parálisis del sueño se recomendará un tratamiento u otro, aunque la clave siempre está en el descanso y en los horarios regulares para evitar que esta parasomnia derive en un problema de insomnio.
HIGIENE DEL SUEÑO
Un estudio de la Universidad de la República de Uruguay resalta que no se puede evitar pero sí minimizar sus efectos manteniendo una higiene del sueño.
Si se trabaja bajo mucha presión, el estrés es inevitable, si se trabaja a turnos seguir un horario regular de sueño no estará a tu alcance, pero hay otras cosas que sí se pueden hacer como priorizar el descanso, evitar medicamentos que alteren el sueño, dormir las horas que necesita tu organismo y evitar bebidas con cafeína y alcohol.
Llevar hábitos de vida saludable también influye en el descanso nocturno, una alimentación variada y equilibrada ayuda a dormir mejor, lo mismo que hacer deporte, pero para que influya de forma positiva hay que hacerlo al menos tres horas antes de ir a dormir.
