La fase 3 de las pruebas comenzará a finales de este mes. (EFE)
La farmacéutica Pfizer y su socia BioNTech consiguieron ayer la autorización por parte del regulador estadounidense para la aprobación por vía rápida de dos candidatas a vacunas contra el COVID-19, informó la compañía.
La Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por sus siglas en inglés) concedió el paso a la vía rápida o "fast-track", lo que permitirá una aprobación más rápida para su uso si las vacunas demuestran ser eficaces y seguras tras las pruebas clínicas.
Según la estadounidense Pfizer, la decisión del regulador está basada en los resultados preliminares de la vacuna BNT162b1 en las fases 1 y 2 en estudios con humanos en Estados Unidos y Alemania, así como en estudios inmunológicos con animales.
Las dos empresas presentaron el 1 de julio un primer estudio de la respuesta a la vacuna BNT162b1 en Estados Unidos, que está a la espera de revisión, mientras que los datos preliminares de las pruebas clínicas en Alemania se presentarán a lo largo de este mes.
"La decisión de la FDA es un importante hito en los esfuerzos para desarrollar un vacuna efectiva y segura contra el SARS-CoV-2", indicó Peter Honig, vicepresidente de Asuntos Regulatorios de Pfizer.
El programa BNT162 incluye dos candidatas a vacunas (BNT162b1 y BNT162b2) contra el COVID-19 basadas en una tecnología de ARN mensajero o mRNA desarrollada por BioNTech.
El comunicado confirmó que la fase 3 de pruebas clínicas, la más crucial, comenzará a más tardar a finales de este mes, algo que ya adelantó el consejero delegado de BioNTech, Özlem Türeci, en una entrevista la semana pasada.
Pfizer y la empresa alemana detallaron ayer que se espera que en las pruebas participen unas 30,000 personas.
"Si los estudios resultan exitosos y la candidata a vacuna recibe aprobación regulatoria, las compañías esperan poder producir hasta 100 millones de dosis a finales de 2020, con la posibilidad de superar los 1,200 millones de dosis a finales de 2021", señala el comunicado.
