Soldados y rescatistas trabajaban entre el fango y escombros junto al desbordado río Kuma, donde muchas casas y edificios estaban cubiertos de agua casi hasta el techo. (EFE)
El número de muertos luego de tres días de fuertes lluvias e inundaciones en el sur de Japón aumentó el lunes a 40, mientras rescatistas buscaban a 10 desaparecidos y la lluvia amenazaba áreas más extensas de la isla principal de Kyushu, informaron funcionarios.
Soldados y rescatistas trabajaban entre el fango y escombros junto al desbordado río Kuma, donde muchas casas y edificios estaban cubiertos de agua casi hasta el techo.
La Agencia Meteorológica emitió la advertencia climática más severa para tres prefecturas en el norte de Kyushu después de que fuertes lluvias golpearon el sur de la isla durante el fin de semana.
A más de medio millón de personas les aconsejaron desalojar Kyushu, incluidos los pueblos ribereños en la ciudad de Kumamoto en donde se recuperaron 40 cadáveres. El desalojo no era obligatorio y se cree que muchas personas optaron por quedarse en casa preocupados por contagiarse de coronavirus, incluso cuando funcionarios señalaron que los albergues estaban debidamente equipados con divisiones y otras medidas de seguridad.
Entre los muertos están 14 de los 65 residentes de un albergue para ancianos situado en la ribera del río Kuma, que es conocido como el “río furioso” porque río arriba confluye con otro y tiende a desbordarse.
El río creció súbitamente y su dique colapsó, lo que causó que el agua fluyera al albergue, en donde la mayoría de los residentes estaban confinados a sus camas o usan sillas de ruedas.
