FARC reclamó al presidente Duque que no solicitó la autorización del Senado para el despliegue de la fuerza militar estadounidense. (ARCHIVO)
La presencia en Colombia de una brigada especial antinarcóticos del Ejército de Estados Unidos es violatoria de la soberanía nacional y abona a las agresiones expresadas desde Washington contra la vecina Venezuela, acusó la bancada del FARC en el Congreso.
"Denunciamos y rechazamos este hecho y alertamos por las acciones irresponsables de la política internacional del gobierno de Duque", que ponen a Colombia en una situación de posible guerra internacional, lamentaron los parlamentarios de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), derivada del conflicto armado.
"Ataques de mercenarios en las costas venezolanas con salida desde la Guajira colombiana, lanchas militares extrañamente perdidas en los ríos fronterizos, contubernio de grupos paramilitares con sectores golpistas del país vecino, declaraciones de funcionarios del gobierno.
"Sumado al despliegue de fuerzas regulares y ahora la presencia de una unidad especializada dejan pocas dudas del interés del gobierno, su partido y sus funcionarios de llevar a nuestro país a una confrontación internacional", argumentó la fuerza opositora.
El gobierno de Donald Trump anunció a principios del mes de abril la implementación de la llamada "Operación antidrogas de mayores esfuerzos", recordó FARC, que inició con el despliegue de una considerable cantidad de buques y aviones de guerra en las cercanías de Venezuela y en aguas territoriales colombianas.
"Rechazamos la violación por parte del gobierno nacional de la constitución política, ya que esta velada forma de legitimar el tránsito de tropas extranjeras por territorio nacional con la excusa de la guerra contra el narcotráfico desconoce el numeral cuatro del artículo 173, que pone en cabeza del Senado 'permitir el tránsito de tropas extranjeras por el territorio de la república'", argumentaron los legisladores inconformes.
FARC reclamó al presidente Duque que no solicitó la autorización del Senado para el despliegue de la fuerza militar estadounidense, lo que atenta contra la soberanía colombiana, la separación de poderes, la autodeterminación y el Estado de derecho.
La amenaza de guerra, además, sucede en momentos en que todos los esfuerzos nacionales deberían enfocarse en la contención de la crisis sanitaria y económica desatada por el COVID-19, que afecta de manera más grave a los sectores más pobres de Colombia, concluyó el partido.
El miércoles 27 de mayo, la embajada de Estados Unidos en Bogotá anunció que la fuerza militar especial comenzará operaciones en territorio colombiano en junio para combatir el narcotráfico.
