El trabajo desde casa al principio significó estar un poco más ‘relax’ y cómodo, pero con la extensión de la cuarentena, se pasó del cuarto, al estudio, sala, cocina, toda la casa, para encontrar un espacio donde lograr mejor concentración. (ARCHIVO)
Antes del confinamiento el uso de los medios digitales era alto y ahora dependemos mucho más de ellos para trabajar, estudiar, ejercitarnos, realizar pagos, buscar recetas, relajarnos, divertirnos y un largo etcétera.
El trabajo desde casa al principio significó estar un poco más ‘relax’ y cómodo, pero con la extensión de la cuarentena, se pasó del cuarto, al estudio, sala, cocina, toda la casa, para encontrar un espacio donde lograr mejor concentración, atender las juntas, llamadas sin tanto ruido y en ese transitar salieron algunos malestares como la fatiga ocular o la vista cansada, que se manifiesta con dolores de cabeza, comezón en los párpados, de repente visión borrosa o nublada, ojo seco e irritación, mayor sensibilidad a la luz o la sensación de que no pueden mantenerse los ojos abiertos y tener episodios de mal humor.
RECOMENDACIONES
Define tu área de trabajo y revisa la ventilación, si está muy fuerte el clima procura que no te pegue directo en la cara. Cuando estés frente a la computadora, tratar que la distancia no sea menos de 40 centímetros, puedes medirlo poniendo el brazo.
Acuérdate de parpadear y no mantener los ojos abiertos mientras lees, evita pasarte de diez a quince minutos, o incluso antes haz un pausa. Se recomienda de dos minutos cada 40 y quince minutos cada dos horas. Parece sencillo pero se olvida, puedes apoyarte poniendo una alarma para que te saque de ese foco de atención y ‘cambies la vista’.
Además el nivel de la visión debe ser hacia abajo y así el párpado cubrirá la mayor parte del ojo, porque si es hacia arriba se propicia más rápido generar la resequedad y esfuerzo.
Gradúa la luz del espacio donde trabajarás, nunca veas la pantalla a obscuras y cuida los contrastes de luz. Lo mismo con el móvil, tablet y computadora no las tengas a tope de brillo. Evidentemente si fumas o alguien cercano lo hace que esté cerca el flujo del aire o ventana, ya que el humo se queda ‘suspendido’ un tiempo ahí y genera la irritación de los ojos, lo preferible es que no esté.
Cuando termines tus labores evita el abuso digital, esto significa que no ‘descanses’ viendo otra pantalla, aprovecha para comer, hacer ejercicio, bañarte o una siesta reparadora. Con los lentes de armazón asegurarse que tengan la graduación adecuada, si son de contacto guardarlos unos días y usar gafas.
USO DE GOTAS
Además para hidratar y humectar los ojos se puede recurrir a las gotas a base de hialuronato de sodio, son las que están disponibles en todas las farmacias. Se pueden aplicar cada quince minutos o cuando pase una hora, dependiendo de la persona y es importante no compartirlas.
